~ 𝐼𝑉 (𝑢𝑝𝑠) ~

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—Eres un tonto Hoseok— Yoongi se encontraba sentado con las piernas cruzadas, estaba a dos horas de entrar a su turno, y Hoseok estaba en su hora del almuerzo— hiciste ver como si el trabajo que quería dejar era así de malo

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—Eres un tonto Hoseok— Yoongi se encontraba sentado con las piernas cruzadas, estaba a dos horas de entrar a su turno, y Hoseok estaba en su hora del almuerzo— hiciste ver como si el trabajo que quería dejar era así de malo.

—No sé tú, pero a mi, me avergonzaría muchísimo si todos supieran que servía como gato— respondió sorbiendo de su refresco.

—Es que si lo dices así, también suena mal— refunfuñó.

Yoongi solía trabajar en un café temático, pero había tres grandes problemas, por los cuales decidió abandonar ese lugar: el primero era que su jefe era un gilipollas. Consiguió el trabajo muy fácilmente porque el jefe había tenido un flechazo con él y creyó que Yoongi le haría caso. Sus días se limitaban al jefe estando tras él, diciéndole lo bonito que se veía y encontrándole trajes que "parecían favorecedores para él". «Sí, cómo no» pensaba Yoongi, porque ¡todos sus trajes eran de gato! No recordaba haber usado otro tipo de disfraz. A veces usaba shorts, algunas otras le pedían usar falda, y aunque podía negarse, no lo hacía, pues le gustaba –aunque no lo hacían las miradas a sus piernas–.

El segundo, era que, no bastaba con que su jefe lo acosara, también, tenía que hacerlo la clientela: hombres y mujeres iban solo para verlo a él, lo que se traducía en más ganancias para el negocio, y una jornada de trabajo más extensa, es por eso que su vida personal se vio reducida, aún más de lo que ya era.

El tercer problema era que el trayecto era larguísimo, y pese a que el esperpento de su jefe le profesase un eterno amor, no quería subirle el sueldo. ¡Trabajaba dos jornadas y no tenía ningún aumento!

—¿Entonces cómo suena mejor?— el desgraciado se reía frente a él con su hamburguesa entre las manos.

—¿Que trabajaba en un café temático?— respondió obvio.

—Ya... ¿y cuál es la diferencia?— tonto Hoseok, «¿por qué tenía que ser heterosexual?» se preguntaba todos los días

¿Yoongi estaba enamorado de Hoseok? Definitivamente. Su sonrisa de corazón y hermosa personalidad lo había hecho enamorarse por completo del chico. El amor no surgió en automático; fueron meses en los que se daba cuenta que Hoseok lo llenaba de energía. Pero él, era hetero, y, además, su mejor amigo.

—A veces me pregunto cómo es que sigues siendo mi amigo— le dijo— eres horrible, siempre buscas la forma de hacerme quedar mal.

—Eso no es cierto Yoongo. Además, sabes que me amas muchísimo— Yoongi hizo una cara de desagrado que hizo reír a su acompañante de manera estridente.

—Gracias de todas formas por ayudarme a conseguir este trabajo— comenzó, para evitar decir algo acerca de amarlo mucho, porque sí, lo amaba mucho, más de lo que a él le gustaría admitir— de no haber sido por ti, seguiría en ese horrible lugar.

—Ser mi amigo te trajo beneficios ¿Qué vas a hacer ahora?— preguntó arrugando la basura.

—Entrar al trabajo— Hoseok alzó las cejas.

𝑆𝑤𝑒𝑒𝑡 𝑁𝑖𝑔𝘩𝑡 [Tᴀᴇɢɪ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora