Chico Perfecto ©✔[+18]

: Capitulo XXI:

Miguel se quedo esa noche en casa mi madre como su esposo le dieron la bienvenida y me sorprendío ver lo bien que se llevo con mi nuevo "primo" imagine qué así sería aunque Miguel era la versión de Nicolás solo que en diferente sangre. Logan no quedaba para nada atras, los tres tuvieron un gran vínculo que me molestó que el supuesto sangre de mi sangre me dejara a un lado por esas dos mastodontes.

Sin embargo detrás de toda la amabilidad de esa noche sentía que algo no andaba bien. Podía sentir una sensación extraña y lo afirme cuando mi madre trajo unos sándwiches a los chicos que conversaban de algun deporte en la sala y no fue su amabilidad en hacer eso, fue en la forma en la que mi madre miro a Miguel.

El chico no se percató de nada, pero yo sí. Me levanté del sofá y camine detrás de la mujer que me dio a luz quien iba directo a la cocina, me pare confundida cuando la vi cambiar de dirección y correr por otro pasillo asi que la seguí. La vi entrar al baño y cuando estuve a punto de tocar lo escuche.

¿Esta vomitando?

Eso me preocupó mi madre no era una de las personas que se enfermaban al contrario de mi persona. Ella era una mujer muy sana. Con los nervios y preguntas me sente en la isla esperando a que mi madre volviera y así fue.

Seguí los movimientos de mi madre esperando el momento indicado para sacar mis conclusiones, mas ella me conoce tan bien que no es necesario que diga algo que me inquieta.

— ¿Quieres decirme algo? — mi madre se puso de espaldas lavando algunos platos.

— ¿Estas bien? — note que se detuvo — te vi correr al baño... y

Mi madre suspiro y se giro apoyando sus manos sobre la isla mientras conocia bien esa clase de mirada.

— ¿Pasa algo malo? — ella no dijo nada aunqur sabia que quería decirlo pero no se atrevió abrir sus labios. Mamá giro la isla y me tomo de las manos, eso me preocupó más.

— Hija sabes que te amo — acarició mi mejilla con su suave mano, pero con el hija sabia que tan serio era. — y amo y siempre serás mi pequeña Smith. París, estoy embarazada.

¿Han sentido que el mundo se detiene? ¿Qué tu cuerpo no responde y lo tu corazón dejo de latir?

— ¿Qué? — había escuchado bien, pero estaba anonadada para articular la respuesta.

Mamá embarazada, bebe... otro hermano. Quería llorar, no de felicidad. Si era hipócrita por aceptar a Benjamin como mi hermano después de tanto tiempo y a Claudia como la esposa de mi padre. Sin embargo, Will aun no era parte de esta pequeña familia y otra personita dentro de la casa me aterroriza de sobre manera. Si, estaba feliz por mi madre, si quería su felicidad y me emocionaba — en parte — la idea de un mini humano corriendo por los pasillos de la casa. No obstante, eso hacía que volviera a la realidad y darme cuenta que el deseo más grade desde que era una niña, fuera que mis padres volvieron a estar juntos como la familia que eramos y que si, me dieran hermano; mas no de esta forma.

Un nudo se formo en mi garganta. Le reí a mi madre tratando de mostrar mi felicidad cuando estaba afligida.

— ¡Eso es genial! — la abracé y cerre mis ojos con fuerza para no llorar como no debería en esta situación. Debía ser madura y aceptarlo, pero costaba tanto ver que tendría dos hermanos con familia separada, con hermanos de mitad de sangre. No era justo pero eso no se lo dejaría ver a ninguno.

— Me hace feliz ver que lo tomes tan bien — sus palabras fueron estacas a mi corazón y solo quería huir de ahí y encerrarme en mi habitación. Mi madre se separó y me miro a los ojos.

— ¿Will lo sabe? — negó.

— Invité a todos con la escusa de anunciar algo, Will piesa que es sobre el matrimonio; no obstante no imagina que sera una gran sorpresa para él.