Club de pasivas #2 ↪ [NCT]

Capítulo 3

—¡¿Qué les pasó?!

DongYoung miró con cara de espanto a los siete chicos que recién habían aparecido a la hora del almuerzo, y que cabe destacar se veían como la misma mierda. Y no era de extrañar, sí para colmo antes de llegar un auto había pasado al frente de ellos, bañandolos con esa típica agua mugrienta y maloliente, y de pasada se habían caído como quinientas veces por estar corriendo mojados por pisos de mármol.

Lo único bueno, es que al llegar le explicaron al director rápidamente (y entre llantos dramáticos y exagerados) que los habían intentado asaltar a todos en el camino, y que por eso habían llegado a esa hora. El hombre al parecer al principio no les creyó, pero después de darse cuenta de las fachadas con las que cargaban y las caras de terror que aún llevaban impregnadas, terminó aceptando esa historia que le habían dado. Preguntándoles también sí no les habían hecho daño, y sí querían que les comunicaran a sus padres, a lo que rápidamente (y por obvias razones) se negaron; pero si aceptaron el hecho de que les dijo que no les pondría una "llegada tarde" o "semi falta" a ninguno porque este caso era delicado. Por lo que en simples palabras: se salvaron el culo de pura suerte.

—¿En serio los asaltaron o qué onda?—Preguntó Mark con una ceja alzada.

—Emmm si y no, larga historia. Después les contamos... —Chittaphon sacó el espejito que tenía en su mochila para tratar de arreglar el desastre que estaba siendo su cabello en aquellos instantes.—¿En donde están los otros por cierto?

—Castigados—Respondió Taeil, que se encontraba sentado en la mesa junto con Donghyuck. El rubio lo miró con cara de "really nigga?"—Si, primer día y ya se buscaron problemas, qué procede...

—¿Qué hicieron ahora los mensos?—Yuta se sentó junto con los demás en la misma mesa.

—Se pusieron a hablar de no sé qué serie, y vieron como son Taeyong y Kun de pasionales en esos temas así que bueno... digamos que se armó una batalla campal y el profesor no tiene mucha paciencia tampoco.—Explicó encogiendose de hombros.—Yo me salvé sólo porque preferí ni siquiera meterme.

—Y Sicheng se fue a llevarles algo de comer antes de que se mueran—Agregó Mark, sabiendo que la ausencia del chico les estaba causando curiosidad.—¡YA JOHNNY, NO ME TOQUES CON ESA MUGRE!

El nombrado hizo un puchero cuando su novio lo alejó ligeramente de él al tratar de abrazarlo por la cintura.—¡PERO YO QUIERO AMOR!

—¡PRIMERO BAÑATE Y AHÍ VEMOS ESO!

Chittaphon rió ante la situación.—Ay su escenita me hizo pensar que al menos tengo un poco de tiempo para arreglarme antes de que Taeyong se infarte cuando me vea.

Donghyuck hizo una mueca—Shit, cierto que es misofobico.—El tailandés asintió frenéticamente.

—Imagínate sí me ve ahora. No va a querer tocarme por los próximos cinco meses.—Puso cara de espanto de sólo pensarlo.

Kunhang soltó una carcajada—Qué mal por ti bro, ¡Suerte que no es mi caso! ... ¡Hola Junnie!

El chico, que recién se acercaba hasta donde se encontraban, los miró con el ceño fruncido unos segundos para después enfocar su atención en el pelinegro y hacer una mueca de asco.

—¿¡QUÉ MIERDA TE PASÓ KUNHANG!? ¡¿POR QUÉ ESTÁS TAN MUGRIENTO?!

—¡Tuve un mal día! Pero no importa... ¡VEN! ¡DAME UN BESITO, AMOR MIO!—Dijo mientras se levantaba de la mesa haciendo piquitos y acercándose lentamente al chico.

—¡NI SUEÑES QUE ME VAS A TOCAR ASÍ, IMBECIL!

—¡ESO YA LO VEREMOS, BOMBÓN!

Y así es como ambos terminaron correteando por toda la cafetería mientras ellos los miraban dar vueltas una y otra vez, como sí no se percataran que los demás alumnos los estaban viendo como sí fuesen alienígenas.