37. Estaré contigo

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Narra Shadow

-Te dije que no. ¡Suéltame! -Escucho sus gritos mientras corro hacia la universidad y al buscar su voz, la encuentro en un callejón. Rose se revuelve en los brazos de un tipo de cabello azul oscuro, que la toma con fuerza de la cintura mientras ella trata de empujarlo.

Me hierve la sangre al instante y ni siquiera pienso en el feroz golpe que le doy en la cara. -¡Bastardo, te dijo que la sueltes! -Grito con toda la furia de mi interior.

Agarro a Rose, que tiene una expresión de profundo miedo, y la pongo detrás de mí para protegerla. El tipo se incorpora y me ve con odio y confusión, me lanzo contra él para darle más golpes.

Es fuerte, bloquea varias veces mis puños pero le doy con fuerza en la cara y el pecho. Alcanza a golpearme en el estómago cuando es empujado contra la pared; veo a mi costado y me encuentro a Omega, que ha interferido en nuestra pelea.

-¡No me ayudes! -Siseo con enfado entre dientes.

-Ellas se han ido. -Musita con una mirada severa.

Él tipo lo escucha y empieza a buscarla con la mirada. -¿Amy? ¡¿Amy, dónde estás?! -Grita con todas sus fuerzas.

Lo agarro del pecho y lo aviento hacia la pared, sosteniéndolo ahí. Él me agarra de los brazos para tratar de apartarme pero no lo logra. -¡¡Tú no vuelves a tocarla, imbécil!! ¡¿Me oíste?!

-¿Quién eres tú? -Espeta empujándome pero me resisto. -¡Ella es mía! -Grita al tiempo que me golpea con algo en la cabeza, zafándose de mi agarre y corriendo hacia la calle, trata de golpear a Omega pero él lo bloquea; aún así tiene el tiempo necesario para escabullirse y correr. ¡Maldición!

Voy corriendo hacia él un poco mareado para perseguirlo, pero el rubio me detiene. Lo insulto tratando de quitarlo del paso.

-No, recuerda que así no se arreglan las cosas. -Dice mirándome severamente.

-¿Y entonces? - Gruño con enojo.

-Ella no se veía bien. -Responde negando con la cabeza. Frunzo el ceño pensando en ello y mi ira se calma, reemplazándose por preocupación. Tengo que ver que este bien.

-Necesito saber qué pasa. -Digo sacando mi celular, le marco pero va directo a buzón. ¡No puede ser!

Camino hacia la calle cuando siento un bulto al pisar, volteo hacia el suelo y veo ahí el celular de Rose, destrozado. Suspiro lentamente calmando mi ira y en su lugar busco el número de Rouge.

-Shadow, estamos en el departamento. -Dice en voz baja al contestar.

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Toco la puerta y espero un largo rato; escucho a la albina preguntar quién es y respondo. No creo que sea buena idea estar aquí si ese tipo ya sabe donde vive. La albina me abre la puerta con una mirada triste y me indica que haga silencio. Me hace una señal para que pase y me señala la habitación de Rose, cuya puerta se encuentra medio abierta.

Camino hasta ahí y al entrar la veo sentada en el suelo junto a su cama, abrazando sus rodillas y con la mirada fija en sus pies. Se ha cambiado el vestido que llevaba por lo que parece su pijama.

-Rose... -Musito suavemente; ella levanta un poco la cabeza para verme y la vuelve a bajar, hundiéndose entre sus brazos.

Me acerco y me siento junto a ella en el suelo, sin decir nada; no sé si pueda ayudarla pero... No levanta la mirada, sólo suspira suavemente y empieza a hablar cuando estoy por preguntarle qué pasó.

-No quería que me vieras así. Es vergonzoso. -Dice en un hilo de voz.

-Si no quieres contarme, lo entiendo. -Digo con calma. -Pero si necesitas hablar... aquí estoy.

Emerald University - A Shadamy StoryWhere stories live. Discover now