☄️Brillo estelar☄️

125 30 8
                                    

Un pequeño Min Yoongi de nueve años escuchaba una vez más gritos en la casa. Había pasado un tiempo desde que eso no pasaba, pero tal vez se debía a qué su padre no siempre llegaba a casa y que su madre había conseguido un trabajo.

Yoongi era lo suficientemente inteligente como para saber que trabajar hacía que él pudiera comer, ir a la escuela y vivir feliz.

Al menos eso le decía su madre.

Yoongi se sentía feliz cuando su casa estaba vacía porque sus padres habían ido a trabajar, el niño no tenía que escuchar gritos feos en esos momentos y se podía concentrar en sus tareas; también era feliz cuando lo iba a visitar ese bonito gato negro y le ronroneaba.

Yoongi no sabía de dónde había salido ese gato, así como no sabía porqué su estrella favorita se había apagado de repente hace años. Lo que sí sabía era que ese gato era Park Jimin, el niño de sus sueños.

Su madre decía que a veces las estrellas se cansaban de brillar y entonces dormían para siempre, pero a cambio, nacían más estrellas que llevaban una parte de las demás.

En una noche de sueño tranquila, Jimin le hizo prometer que no dijera nada de él a sus padres, pues ellos no entenderían y Yoongi le creyó, lo sabía. Por lo que el lindo gato negro y el bonito niño de sus sueños que brillaba en color dorado era alguien que sólo él sabía.

Él y su libreta especial de dibujos, donde sus padres no preguntaban nada porque era un niño con imaginación activa y pasión por el arte. Al menos eso había escuchado a su maestra decirle a sus padres en una junta de calificaciones; ellos a pesar de quererse de una forma fea a él lo querían bonito, por lo que lo mandaron a clases para mejorar lo más que podía esas materias que no entendía y, a su vez, le compraron muchas cosas para dibujar.

Sus padres no preguntaban nada sobre los constantes dibujos de un gato negro ni del niño rubio que estaba en su libreta, ellos simplemente no la veían a menos que si hijo les enseñara algo.

Así que mientras los gritos en su casa seguían Yoongi abrió la ventana sin ayuda de ningún banquito, pues había crecido lo suficiente, y observó el cielo.

La luna brillando a un cuarto de su esplendor y muchas estrellas rodeándola.

Yoongi extrañaba ver a su estrella favorita en el cielo, esa que parecía brillar cuando más triste se sentía, pero ahora tenía a Jimin, el lindo gato negro que en sus días feos se colaba por el hueco de su ventana a su habitación y se enroscaba a su lado ronroneando. Arrullándolo; hasta que caía rendido al sueño y, dentro de sus sueños, convertía sus pesadillas en lindos momentos.

Sí, a Yoongi también le gustaba eso.

☄️☄️☄️☄️☄️☄️☄️☄️☄️

No debería estar actualizando, pero me sentí inspirada u.u

Aster [YM/JS]Where stories live. Discover now