Cap 3: Casa

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Narra _____:
Al final, opté por comer algo de lo que me dieron, sólo una parte, pero fue un poco más de lo que venía comiendo. Mi cabeza me estaba maquinando exactamente sobre eso y estaba intentando encontrar una manera para recompensarlo. No lo vomitaría, no me gusta eso, jamás lo he hecho y jamás lo haré, así que encontraré otra manera. Quizás hacer ejercicio, podría hacer algunos abdominales cuando volviera a casa. Eso sería en sólo una hora. Sí, creo que eso será lo que haré.
El chico que me ofreció comer con él se llamaba Mike y llevaba aquí unos 3 meses, no me molesté en aprender los nombre de las otras chicas.
"Oye, no quiero tocar el tema pero, será mucho más fácil cuando te atrevas a dar el primer paso"- sus palabras me volvían a la cabeza. Es lo que todos dicen pero, creo que tuvo otro impacto al decirlo alguien quien tuvo que dar ese paso también.
Cuando todos terminaron, nos dijeron que fuéramos de nuevo a nuestra habitación, así que lo hicimos. Yo esperé a que todos salieran y Mike me esperó, así que salimos hablando. Hablamos de nuestra edad, la escuela en la que íbamos y esas cosas. Yendo hacia la habitación, creí que alguien me miraba y supe que era cierto cuando giré mi cara y vi a un chico mirarme. Parecía más grande que yo y tenía el cabello castaño claro, un poco más oscuro que el mío. Me miraba con el ceño fruncido y los ojos un poco más abiertos de lo normal, quizás eran así. También tenía un gesto que no podía explicar muy bien en los labios, pero era como si le diera asco. Giré mi cabeza rápido, ya que mis ojos me empezaron a arder, pero aguanté las lágrimas y en un momento ya no estuvieron más.
A las 8:40 todos empezaron a irse y fue ahí cuando recibí un mensaje de Liz, el cual decía: "Realmente no puedo ir ahora, lo siento. Mañana llegaré, lo prometo. Ya llamé para autorizarte, así que ven en cuanto antes". Obedecí y salí del hospital. En el camino pensé que cuanto se preocupaba Liz por nosotros. Ella era la directora del orfanato, pero era casi como nuestra mamá. El gobierno ponía fondos para cubrirnos, pero ella trabajaba una parte del fin de semana para aumentar el dinero disponible. Yo me encargaba del orfanato los fines de semana por la mañana mientras ella trabajaba, pero como ahora no puedo, lo hace ella.
Llegué a la puerta y entré. Subí a mi habitación y Melina me saltó encima en un abrazo, aunque se disculpó, ya que pensaba que mis fuerzas no podrían aguantarla, no me gustó eso. Melina es mi compañera de habitación pero como hermanas y hemos vivido prácticamente siempre juntas aquí. Yo siempre creí que ella era hermosa, tiene pelo corto y lacio, ojos ámbar claro que a veces hasta creías que eran de miel. Eran sólo unos centímetros más alta que yo. Me pidió que le contara como era todo allí y yo le conté algunas cosas, pero no quería entrar en detalle. Yo sabía que Mel se sentía muy culpable, porque ella sabía todas las cosas que yo hacía y porque lo hacía, pero yo le rogaba que no dijera nada, aunque no debería, es todo culpa mía.
Bajé a buscar a Liz y estaba terminando de comer con los niños, los cuales corrieron a abrazarme en manada y se escuchaban los gritos de Liz de fondo de "Con cuidado". Yo lo recibí a todos con entusiasmo, quizás no éramos exactamente familia, pero yo los sentía así. Luego, fui hacia Liz y ella me abrazo.
-Lamento no haberte podido recoger hoy.
-No te preocupes.
-Pero, me dijeron que no lo estas haciendo muy bien.
-¿Es necesario hablar de eso ahora?
-De acuerdo, ve.
Subí a mi habitación y Melina ya se estaba lavando los dientes, para acostarse, ya que mañana tendría escuela. Fue hasta su mochila, sacó algunas hojas y me las dio.
-Pensé que no querrías atrasarte. Hablé con la directora, ella ya estaba informada de todo y dijo que yo te traería las tareas diarias y las entregaría el día que haya que hacerlo y, que cuando vuelvas, sólo tendrás que hacer un examen. También dijo que quizá querrías cambiarte de escuela, y que si quisieras hacerlo, tendrás que hacer el mismo mismo.
-De acuerdo... Y gracias, ¿No hay ninguna por ahora?
-No, igual ya sabes como son, las tareas las entregan con una semana de anticipación por suerte.
-Si, es cierto. ¿Irás a dormir ahora?
-Si, o no despertaré mañana, ¿te despierto conmigo?
-Claro, por favor
-De acuerdo- dijo y me abrazo- Te extrañé
-También yo- respondí sonriendo- Buenas noches.
Se acostó y yo empecé a guardar algunas cosas en un bolso para mañana. Puse algunas cosas de higiene personal, mi celular, mis auriculares, el cargador de mi celular, algo de dinero por emergencias, tomé mi guitarra y cuaderno borrador de canciones. No se si me dejarían tenerla allí, pero lo intentaré.
Cuando terminé de armar mi mochila, recordé que debía hacer algo de ejercicio. Estaba demasiado cansada, pero no iba a dejar que eso me impidiera hacer algunos abdominales. Melina ya se había dormido así que empecé a hacer mi acostumbrada serie, la misma que hacia después de cada comida. Luego de 20 minutos terminé y fui al baño a lavarme la cara. Eran como las dos de la mañana y al día siguiente debía despertarme un poco antes de las 7, no sabía como haría. La habitación ya estaba oscura y creo que todos en el lugar estaban dormidos. Siempre le tuve algo de miedo a la oscuridad, miedo de que aparezca una muñeca malvada de algún lado o de que algo me succionara los pies en la cama, creo que nunca superaría eso. Pero intentaba dormir de todas maneras. Me acosté en la cama de abajo. Yo tenía la de arriba pero quieren que duerma en la de abajo por si me llega a pasar algo y me caigo, aunque en realidad puede pasarle a cualquiera. Lugo cerré los ojos e intenté dormir y después de unos minutos ya estaba perdida.
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Holaaaa!! Bueno no subí capítulo por unos días porque ver que el primer capitulo tenía muchas leídas pero el 2do nose me da la sensación de que no gustó y me arrugué y no la seguí más pero lo importante es que me guste a mi y por eso la sigo♥

Lo que Ana me regalóWhere stories live. Discover now