Capítulo 39

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Apenas se vio dentro de las fauses del demonio, Vesta aceptó la muerte como si lo estuviera esperando desde hace mucho.

Perdió el conocimiento por un momento cuando el dolor de las heridas causadas por los colmillos se volvió casi insoportable.

— Ves...ta — escuchó la voz de Borja.

¿Borja? — lo buscó sin poder encontrarlo.

— Ves...ta...

Despierta, cariño... — escuchó la voz de un hombre — sé que puedes hacerlo. Tú eres mucho más fuerte que yo o que mamá...

¿Qué debo hacer?

— Sabrás qué hacer... — escuchó una voz femenina — ahora despierta...

Antes de despertar, escuchó la voz de Remena y el gruñido de Borja. Se sintió feliz de saber que Borja había despertado a pesar de casi matarla. Ahora ella debía despertar para evitar que atacara a alguien más.

—...ja... — apenas le salió la voz. Intentó moverse; pero el dolor era muy grande —...duele...

Sintió el inconfundible tacto de Borja en ella. Frío, áspero; pero agradable y familiar. Fue a él a quien vio apenas abrió los ojos.

— Hola... — Sonrió — Te prometí que volvería... — sonrió antes de desmayarse nuevamente.

Al no saber qué hacer, Borja rugió con fuerza en todas direcciones, para luego correr hacia el muro en donde estaban los humanos.

Al llegar, golpeó su cabeza contra el muro haciendo que la tierra temblara y que los hombres cercanos cayeran completamente sorprendidos y asustados.

Nadie se movía. El saber que estaban a salvo del otro lado era algo que estaba a su favor. Pero algo inesperado pasó.

— Está... — dijo uno de los hombres con la voz temblorosa.

Por un breve instante, el muro se desvaneció; y en uno de sus golpes, Borja salió del bosque. Todo su cuerpo atravesó el muro, excepto una pata que detuvo su avance al quedar atrapada; pero eso no lo detuvo para matar a los más que pudo sin necesidad de separar sombras de él.

— Está muy débil... — dijo Remena.

— Si ella muere, el muro se va con ella — dijo Raksha.

— ¿Qué podemos hacer? — Escucharon gritos a lo lejos.

— Yo me encargaré de Vesta — dijo Raksha — ustedes intenten contener al demonio, que no salga del bosque. — Remena y Ryuka obedecieron.

— Bor...ja... — balbuceó Vesta.

— Quieta... Esto te ayudará... — utilizó su magia para envolver su cuerpo con hojas sanadoras. — ¿Ahora entiendes lo peligrosas que son estas criaturas?

— No lo... No lo son... — dijo mientras luchaba por no dormirse — tú no los conoces como yo...

— No necesito conocerlos como tú... Lo único que hacen es asesinar a sangre fría — miró al par de demonios.

— ¿Qué es ese ruido? — preguntó Vesta.

— ¡Borja está fuera del muro! — apareció Gob.

Vesta intentó levantarse; pero a pesar de la efectividad de la magia de Raksha, aun estaba muy débil.

— Tengo que ir con él...

— ¡No debes moverte!

— ¡Yo puedo calmarlo! — siguió intentando moverse —  necesito hacer que vuelva adentro — vio una mano con largas garras negra extendida hacia ella — Lanch...

— Te llevaremos allá. Cuenta con nosotros...

— ¿Si quiera sabes lo que harás? — preguntó Lonch. — ¿Cómo harás para que vuelva adentro si lo único que queremos es salir?

— Perdónenme... — bajó la mirada — pero quiero protegerlos... Y después de lo que hemos vivido este último tiempo... Prefiero dejarlos adentro... — Los demonios no parecieron muy convencidos por la decisión de Vesta — no quiero verlos morir...

— ¿Qué estás...? — murmuró Raksha.

— Ambas sabemos que "esto" es grave... — sonrió con tristeza — tía Raksha... Cuando logre controlar a Borja... — sus ojos se llenaron de lágrimas —... Quiero que hagas algo por mí...y por mamá...

Raksha guardó silencio a la espera de que Vesta le explicara lo que quería que hiciera.

El Bosque De Los Demonios (1)Where stories live. Discover now