Ambos se encontraban cenando, hoy había sido un día sumamente agorador. Desde la mañana, Xiao Zhan tuvo que salir para hacer una sesión de fotos que le tomó desde las ocho hasta las doce del mediodía, por lo que tuvo que levantarse cerca de las cinco para poder irse hasta el estudio de fotografía. Yibo, por su parte, a la seis debía salir para grabar un episodio de DDU que, por error de uno de los técnicos, terminó borrándose hasta la mitad y lo que quedaba estaba dañado. Luego, Xiao tuvo que ir a revisar cómo iban las cosas con la campaña que había hecho para ayudar a los que se habían visto afectados de manera económica y laboral. El manager de Yibo aprovechó haberlo visto ahí para enviarlo a filmar unas escenas que al director de lof se le habían ocurrido rehacer a última hora.
Pará cuando llegaron a casa, el sol ya se había puesto. En el caso de Xiao, eran cerca de las siete y media de la noche, al no ver a Yibo, se propuso hacer algo de cenar, algo simple pero que a ambos les gustara. La mesa estaba arreglada y con comida recién hecha cuando Yibo volvió a eso de las nueve y cuarto.
- "¡Gege! ¡Ya volví! " - saludó al entrar a la casa dejando su bolso volado en alguna parte de la sala en su camino a el comedor. - "Hola bo-bo" - sonrió Xiao al ver a su novio pasar por el marco de la puerta, se notaba cansado, más de lo usual, - "¿Por qué está todo tan arreglado?" - fue la primera pregunta que salió de los labios del menor al ver las dos copas de vino y la botella del mismo, un arreglo floral que juraría no haber visto antes en esa casa y algunos detalles pequeños, como pétalos de peonías en algunos lugares de la pequeña mesa para dos, los cuáles seguramente Zhan pensó que no se daría cuenta.
"Pues, hemos estado muy ocupados últimamente y quería celebrar contigo que por fin tendremos un descanso, aunque sean sólo unos cuantos días" - respondió Xiao - "¿Por qué? ¿Es mucho?" - Yibo negó sonriente, sonrojado y agradecido. Nervioso también, no sabía si lo que iba a hacer luego sería buena idea. Se acercó a la mesa, yendo a sentarse sobre las piernas de Xiao Zhan quien había alejado su silla un poco para levantarse a abrazar a Yibo. El menor lo besó con parsimonia, en un intento de demostrarle su amor. Se separaron pegando sus frentes dándose un beso esquimal. Yibo bajó de los muslos de Xiao antes de ir a sentarse al otro extremo de la mesa, la cuál tenía la suficiente distancia para que ambos se tomaran de las manos.
Empezaron a comer, charlando de cómo había sido su día y lo que planeaban hacer juntos en sus vacaciones. Cuando la copa de Zhan iba a la mitad - y la de Yibo había sido rellenada ya una vez -, el menor se levantó sin previo aviso en medio el silencio cómodo en el que estaban.
"Xiao, quiero decirte algo" - dijo acercándose a él, jugando con sus manos entrelazadas, - "¿Qué pasa Yibo?" - preguntó un poco alerta, pues su pareja se veía muy nerviosa. Entonces Yibo se arrodilló, sin soltar la mano del contrario sacó una pequeña cajita aterciopelada negra.
"Xiao Zhan, eres la persona más especial y perfecta que he conocido; eres el único que me comprende totalmente, el único que sabe como hacerme sonreír aún sin decir una sola palabra. La única persona que me hace feliz por el simple hecho de respirar, y el único al que siempre voy a amar. Eres perfecto en cada aspecto y en todo lo que haces. Xiao Zhan, ¿aceptarías a este pobre hombre como tú esposo?" - Zhan se mantuvo en silencio, observando atentamente al menor mientras hablaba. Su rostro no mostraba ninguna emoción y si de por sí Yibo ya tenía miedo de haberlo arruinado todo, ahora creía que enserio lo había hecho. Iba a volver a hablar cuando escuchó al mayor reír. - "No puedo creerlo..." - comenzó tapando su rostro con una mano entre risas, las orejas de Yibo estaban rojas de vergüenza, ¿y si Xiao Zhan no quería algo tan serio como esto? Peor aún, ¿Y si no lo consideraba suficiente? Todo pensamiento se esfumó cuando vio al mayor sacar una caja similar a la suya, pero en blanco.
"¡Claro que quiero! Pero..."-hizo una pausa - "Creo que pensamos lo mismo" - murmuró luego de un pequeño suspiro. Xiao abrió la cajita y pudo notar que incluso el estilo era el mismo. - "Quiero oír tu discurso" - susurró emocionado Yibo, Zhan sonrió y se arrodilló, intercambiando lugares.
"Wang Yibo, amor mío, he estado pensando en esto mucho tiempo, luego de unos meses de estar contigo supe que quería que fuera así para siempre. Eres mi fuente de inspiración, como una musa que hace que cada cosa que haga tenga un valor y gire solamente en torno a ti. Te amo con todo mi ser y solamente quiero estar contigo incluso en nuestras siguientes vidas. Sé que no podemos tener por seguro que estemos destinados a estar juntos, pero yo quiero creer que si. Así que, aunque ambos sabemos la respuesta - teniendo en cuenta que me lo acabas de pedir -, señor Wang, ¿podrías aceptarme como tu esposo y pasar el resto de tus días conmigo hasta que seamos viejitos y nos paseemos todas las tardes en una pequeña casa cerca de un laguito, donde nadie nos interrumpa y podamos vivir felices los dos?" - Yibo tenía los ojos llorosos, ah, Xiao enserio, enserio, era algo tan perfecto.
Al no tener palabras debido al enorme nudo en su garganta, se abalanzó besando sus labios, dejando que las lágrimas de felicidad de ambos corrieran por sus mejillas. Se colocaron el anillo el uno al otro felices de haberse dado el 'si' tan deseado. Se continuaron besando hasta llegar a la habitación sin terminar ahí. Debían tener una celebración privada después de todo.
🍕
Ya bro ya terminó uwu, voy a subir un epílogo y hasta luego.
Pdt: tengo hambre.
Pdt2: gracias por leer ^^♡
