𝐵𝑒𝑠𝑡 𝑂𝑓 𝑀𝑒 ➛ 𝑁𝑒𝑗𝑖 𝐻𝑦𝑢𝑔𝑎

𝙲𝚊𝚙𝚒́𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚘𝚌𝚑𝚎𝚗𝚝𝚊 𝚢 𝚞𝚗𝚘

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— 𝐁𝐄𝐒𝐓 𝐎𝐅 𝐌𝐄 —

"𝑌𝑜𝑢 ℎ𝑎𝑣𝑒 𝑡ℎ𝑒 𝐵𝑒𝑠𝑡 𝑜𝑓 𝑚𝑒,
𝑠𝑜 𝑝𝑙𝑒𝑎𝑠𝑒 𝑑𝑜𝑛'𝑡 𝑙𝑒𝑎𝑣𝑒 𝑚𝑒"

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Todos estábamos esperando el momento exacto para atacar, el momento en el que los Hokages dieran la señal.

—Ahora —avisé cuando abrieron un poco la barrera y todos nos dirigimos a atacar al Juubi, o eso intentaríamos.

De las manos del Juubi comenzaron a salir clones con diferentes formas y tamaños, algunos un poco más grandes que nosotros, de dos metros, de tres y otros más que eso.

—¡No retrocedan! —gritó Naruto a los ninjas sin demostrar alguna señal de miedo o temor en la voz.

Él y Sasuke fueron los primeros en atacar a los clones, con velocidad y precisión queriendo acaparar toda la acción para ellos. Apreté mis puños dispuesta a soltar los golpes con toda mi fuerza de verdad, con la fuerza que he ocultado tanto tiempo.

—Por Kamisama, por favor que despierte el Byakugou antes que Sakura, quiero ganar la apuesta —murmuré.

Estoy dispuesta a terminar esta guerra, a salir vencedora, a proteger a Konoha y la paz de la aldea, eso por lo que muchos han sufrido, esa paz por la que Shisui murió, por la que se fue de mi lado, por la que sufrió demasiado. La paz en la que quiero que Konohamaru, Udon, Moegi y Mirai crezcan, por la que estamos peleando todos y ¡La paz para las futuras generaciones!

—¡Los voy a acabar! —golpeé a uno de los clones partiendolo en varios pedazos mientras es alejado de mi por la fuerza con la que solté el golpe.

Busqué a Sakura quien me mira sorpendida y yo a ella al notar aquella marca en su frente y seguro yo también la tengo.

—¿Quien fue la primera? —gritamos a la vez hacia los demás.

—¿Eh? ¡Hana-chan, por unos segundos! —dijo Ino señalandome.

—¡Sí! —festejé mientras mi compañera suelta un suspiro—. ¡Sakura-chan, gané la apuesta! —sonrió de lado y asintió.

—Lo sé, pagaré en cuanto volvamos a la aldea —asentí emocionada.

Dirigí mi mirada a Neji quien al verme dio un paso atrás sorprendido por mi fuerza, a lo que yo solo solté una risita y le guiñé.

Sakura y yo golpeamos a uno de los clones al mismo tiempo mientras Naruto y Sasuke se ponen detrás de nosotras con sus espaldas junto a las nuestras.

—Tranquila, Sakura, trataré de no comer mucho ramen —soltó una risita.

—Eso es casi como pedirte que dejes de respirar.

Cada uno de los otros equipos comenzaron a demostrar sus nuevas técnicas y debo decir que me encantó la formación Ino-Shika-Cho. Naruto salvó a Sai de una caída causada por un clon del Juubi tras sentirse un poco mal por no ser parte del original equipo siete.

—Debemos aprovechar para acercarnos, debe ser un ataque tan bueno que lleguemos de un salto.

Los cuatro nos miramos y sonreímos al saber cuál usar.

—¡Kuchiyose no Jutsu! —tocamos el suelo.

Debajo de Sakura apareció Katsuyu, Naruto invocó a Gamakichi y Sasuke una enorme serpiente. Los tres me miraron y luego lo que hay debajo de mi quedando sorprendidos.

—Ha-Hana-chan... —dijo Naruto nervioso.

—¿Qué? No iba a invocar a Katsuyu o a Gamakichi —dije con una sonrisa de lado—. Después de todo, mi padre es conocido por invocar perros, no es justo dejar de lado eso siendo su hija. Les presento a Arashi —el enorme perro debajo de mi comenzó a gruñir.

Naruto lo miraba asustado al igual que Sakura. Un pitbull enorme, no es muy común, pero es hermoso y me encanta.

—Tranquilos, no les hará nada, a menos que sean enemigos.

—¡Es el triple punto muerto! —gritó un ninja con sorpresa.

— No, ahora son cuatro y ahora hay un perro y una Hatake! —recalcó otro Shinobi.

—¡Y es Hana Hatake! ¡Su padre debe estar orgulloso! —apreté un poco los puños pensando en mi padre, espero que le vaya bien en su batalla contra su compañero.

—¡Andando, Gamakichi! —gritó Naruto.

—¡Avanza, Aoda!

—¡Por favor, Katsuyu!

—¡Corre, Arashi! —el perro comenzó a correr con velocidad—. ¡Sakura, si te agotas dime para cambiar! —asintió

—¡Sí!

Mi compañero canino dió un salto y se puso entre todos los clones deteniendo su paso.

—¡Ustedes vayan a él, los cubriremos! —grité a mis dos compañeros.

Arashi dio un gran ladrido y envío a los clones lejos de Sasuke para dejarlo pasar. Hice unos sellos tomando aire y di un salto soltando el aire hecho lava sobre muchos de los clones mientras Arashi ataca con sus habilidades.

El ataque de Naruto y Sasuke logró darle al Juubi, las llamas del Amaterasu quedaron en el cuerpo de esa cosa, pero esté desechó esa parte de su cuerpo con facilidad. De pronto Obito apareció cayendo sobre el Juubi.

—¿Dónde está... papá? —murmuré con miedo imaginando lo peor.

Minutos después el Juubi comenzó a ser absorbido por Obito quien en segundos se convirtió en una esfera blanca.

—¿Qué ocurre? —preguntó Arashi.

—Ese es... —la esfera se quebró y de ella salió algo muy diferente al Obito de antes—. ¡Es el Jinchuriki del Juubi! —dije sorprendida.