Cap. 14.2

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----->  Max y yo pasamos un buen rato ahí, tirados en el césped contemplando nubes, ignorando el mundo y enfocados en nosotros, si es que hay un nosotros.

-Demonios, falta poco para que las clases terminen, debemos regresar-

-Descuida, no estamos lejos-

-No, no lo entiendes. Cada día debo videollamar a papá desde mi último salón de clases- me responde Max.

-¿Por?-

-Digamos que en mi anterior escuela solía escaparme varias veces seguidas y por eso también me envió aquí, debo demostrarle que soy capaz de ser un buen alumno- poniéndonos de pie.

-El estar físicamente en una escuela no te hace buen alumno- riendo un poco.

-Lo sé, pero él cree que cumpliendo las reglas, como por ejemplo asistir a clases en días de escuela me hará madurar, ya sabes, ser más responsable. Es una tontería, pero le prometí que no lo volvería a hacer- me toma de la mano y caminos velozmente.

-Ven vamos, conozco un atajo- ahora yo lo guio. En algunos minutos logramos llegar a la escuela. Justo antes de que sonara la campana final.

Entramos y se apresura a decirme:

-Te escribo. Debo utilizar un fondo de salón de clases para marcarle- avanza por el pasillo, llega a la mitad y se detiene de freno, rápidamente regresa y me planta otro suave beso en la mejilla. Justo cuando estoy a punto de hablar veo a Max azotado en los casilleros. Andrew lo empujó muy fuerte.

-¡¡¡¡¿Qué te sucede?!!!!!- lo aparto hacia atrás para intentar ayudar a Max que se dejó caer al piso. Andrew me toma tajantemente del brazo y me jala hacia él separandome de Max.

-¿Por qué te besó?- me grita a la cara muy alterado.

-Tranquilo, ¿Por qué te pones así?- asustado por su enrojecida cara y por sus puños cerrados. Andrew me intimida bastante y el hecho de que sea más alto que yo lo empeora todo. Es como si estuviera viendo a un guardaespaldas enfurecido y a punto de atacar.

-Te hice una pregunta- le da un fuerte golpe al casillero a mis espaldas poniéndome a temblar.

-No te atrevas a hacerle daño- Max lo aparta pero no lo empuja, sólo lo contiene abrazándolo fuertemente. Es como si Max supiera qué hacer, como si ya lo hubiera visto así antes.

Andrew luce más tranquilo en unos segundos. Yo siento que estoy a punto de llorar, tengo miedo.

-¿Por qué lo besaste?- desde los brazos de Max pregunta.

-Tranquilo, está bien, somos novios- yo me quedo en shock.

-¿Novios?- ahora me pregunta a mí.

-Ummm...no, bueno...no- con mucha duda en mi respuesta.

-Bueno, en realidad solo estamos saliendo- le aclara Max.

-Pero no puedes- me dice Andrew.

-¿Por qué no?- se queda callado cuando le pregunto. Se safa de Max. -Ahora no hablas- le reclamo. Andrew mira al piso.

-¿Estás mejor Andy?- le dice Max y Andrew asiente. -Bien, debo irme, los veo después-

-No debes salir cuando te quiero ver, te busqué en el almuerzo y en tus clases, pero no apareciste, no lo vuelvas a hacer- menos alterado pero aún con la cara enrojecida y con cierta melancolía en su mirada.

Yo no planeo hacerlo enojar de nuevo así que rápidamente se me ocurre la solución.

-Toma- sonriéndole para tranquilizarlo le extiendo un pedazo de papel.

-¿Qué es esto?-

-Lo que me pediste. Las respuestas a tus preguntas del mensaje-

-Oh, perfecto. Gracias. Es bueno que me obedezcas-

-¿Ok?...- le respondo.

-¿Cómo está Henry?-

-Bien, gracias por preguntar. Papá lo está cuidando ahora- con miedo de que ataque como un animal.

-Muy bien. Cualquier cosa que necesites, puedes decirme, en serio, lo que sea- me toma de la mano y me mira. Sus ojos azules me hacen olvidar el trago amargo de su arrebato.

-A veces es tan lindo- me digo en mi mente. Andrew está por desdoblar la hoja que le di.

-No espera. Tengo una condición-

-Claro, lo que tú quieras- me sonríe ligeramente y mucho más tranquilo ahora.

-Que te las diga en persona. Eso que me pediste saber te lo diré yo. Cuando sea el momento adecuado-

-Está bien como prefieras- y guardó el papel en su mochila. -Bien ahora te llevaré a casa- me engancha del brazo como si fuéramos unos recién casados y me hace caminar a su lado. Me siento un poco incómodo, pero no quiero otro episodio de Andrew alterado entonces no digo nada. Llegamos, Andrew me abre la puerta y me ayuda a bajar.

-Descansa-

-Gracias, tú igual- sin decir ni hacer nada más me doy la vuelta.

Ahora estoy en mi cama perdido en mi celular comiendo un plato de fruta picada. Me llega un mensaje. Lo abro. Oh sorpresa. -"Gracias por hoy lindo"- suelto la cuchara y cae sobre la sábana. Mi estómago de nuevo revuelto. El mensaje de Max está firmado con un emoji de corazón.

-¿Qué quiere decir esto?- me angustio y sonrío, necesito ayuda así que grito. -¡¡¡¡DeeDeeeeeee!!!!!-  


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Gracias por leerme, déjame un comentario <3 

Sugar BowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora