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N/P: 805

Una libreta des-hojada estaba entre sus manos inquietas y un bolígrafo azul al cual le chorreaba ligeramente la tinta, mientras que aún lado yacían el montón de hojas arrancadas, arrugadas y llenas de rayones y letras, en el cesto de basura a lado de su escritorio, desbordandoce.

Keith se había encerrado en su cuarto, intentando descifrar sus propios pensamientos como si fueran un montón de jeroglíficos. Decidió tomar la idea que Lance le había propuesto, pero sin que él se diera cuenta claro está o su orgullo sufriría una enorme ruptura.

Llevaba ahí desde las 12 del día y ya su reloj de mano marcaban las 5:04 pm, a pesar del tiempo invertido aún no podía descifrar lo que sentía, sólo que su compañera de batalla contra los galra aparecía en todos ellos, nunca supo como lidiar con ese tipo de pensamiento, porque de una u otra manera su barrera de hielo contra la sociedad siempre lo había protegido.

Aquello ya le estaba frustrando la mente, decidió levantarse, no sin antes esconder todo como si se tratase de una escena del crimen.

Fue a la cafetería por un sandwich de mortadela, luego fue a la máquina dispensadora por un refresco y unas frituras de queso.

Keith no acostumbraba a comer comida chatarra, así que, cuando probó sus frituras y su refresco creyó oír el coro de los Ángeles cantar de lo bien que sabía. Desde muy pequeño cuando comenzó los entrenamientos para ser piloto, antes de ser expulsado y por supuesto antes de ser un paladín; empezó a llevar una rutina sumamente estricta de ejercicio, al igual que una buena dieta muy bien balanceada, pero sin nada de comida chatarra; así que cuando fue expulsado siguió entrenando y comiendo bien debido a lo acostumbrado que ya estaba, y aunque cuando fue paladín ya no seguía su dieta al pie de la letra, no podía comer comida chatarra ya que no hay máquinas expendedoras de chatarra flotando por el espacio ¿o si?

Tiro la basura a su cesto de basura, pero no cayó en el sino que rebotó, ya su cesto de basura estaba lleno de papeles con escritos sin sentido.

Su mente estaba fatigada, el aniversario sería pronto, al igual que el despegue del Atlas, tenía que afrontar muchas cosas y más ahora que su cabeza no cooperaba consigo mismo.

—¿Planeas quedarte el resto del día ahí sentado?— La voz de Shiro lo despertó de su transe, trayendolo de regreso.

—¡Shiro!, perdón, yo… eh…— No sabía ni siquiera que decir, su problema con poder descifrar sus pensamientos al parecer también le estaba afectando el habla.

—Tranquilo Keith, no vengo a regañarte ni nada, creo que ya estás muy grande como para saber que hacer—Lo miro con ojos amistosos, dando a entender que solo estaba ahí porque le preocupaba su amigo, su casi hermano. —Solo quería decirte que fueras viendo cuando sería el día perfecto para que empieces tus clases.—

—¿Clases? ¿De qué hablas?—

—Recuerda que la semana pasada, el director Dos Santos, te pidió que tu instruyeras a los nuevos pilotos, gracias a tu gran destreza como piloto, te eligió esta tarea—

—Oh, ya recuerdo…—

—Sí, será mejor que te organices para ello—

—No pienso hacerlo— Su rostro mostraba seriedad, pero sus ojos demostraban frustración sólida.

—¿Qué…?—Estaba perplejo —Es un cargo muy importante Keith, no puedes renunciar a el así como si nada. Sin siquiera intentarlo…—

—Es que no se trata de eso Shiro, en este momento no me siento capaz, tengo un revoltijo de ideas en mi cabeza, que ni siquiera yo mismo puedo descifrar— quería soltarse a llorar, pero siempre había sido fuerte y aún debía serlo —Simplemente no puedo Shiro, mi cabeza no da para más—

—Keith, cuéntame cuales son esas ideas, intenta ser lo más detallado posible, tal vez si lo dices en voz alta, lo logres descifrar— La sonrisa de Shiro logró traerle algo de paz, tal vez tenía razón, debía intentarlo.

—Es que francamente no lo sé, esto empezó cuando…—Ella estaba en cada uno de sus Pensamientos sin excepción alguna —Bueno, verás, hace un par de semanas empecé a convivir un poco más con Pidge y fue cuando los pensamientos empezaron surgir en mi cabeza, revoloteando en mi mente como mariposas de un lado a otro…—

—¿Pidge?… ¿No será que tú…?

—¿Qué yo qué?—

—Tú sabes—

—¿Yo sé?

—¡Si tu sabes! ¡No te hagas tarugo!—

—¡Quiznack! ¡Shiro, no entiendo clave morse!—

—¡No es clave Morse, son indirectas! ¡Y para empezar, deberías saber clave morse, todo cadete debe saberlo!—

—¡Pues no! ¡No sé clave Morse! ¡Y mucho menos entiendo indirectas!—

—¡Santo Cielo Keith!—

—¿¡Por qué estamos gritando?!—

—¡Porque estas de tarugo y no entiendes las indirectas, y no sabes clave morse!—

—¡Sé directo por favor y dilo, porque enserio no te entiendo!—

—¡Carajo! ¡Que te gusta Pidge!—

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¡Hola, Hola!
Aquí su Alienigena favorita reportándose UwU
Espero y este capitulo haya sido de su agrado y lo hayan disfrutando tanto como yo al escribirlo :3
Ahora las preguntas <3

❤️ ¿Creen que Keith abra los ojos con lo que dijo shiro? 🧐

🖤 ¿Piensan que Shiro es experto en indirectas por Adam? 7w7

❤️ ¿Keith podrá aprender clave morse? 🗣️

Gracias por haber llegado hasta aquí :3
Se les aprecia.
Sin más que decir, me retiro 🐰

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✳️ Este fanfic necesita amor, al igual que Keith, así que comenten y voten a lo desquiciado 😏

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¿Y qué pasó después? (Kidge) [REESCRIBIENDO] Where stories live. Discover now