Jeon Jungkook y Jeon Aisha, herederos de la familia Jeon, autoproclamados los mejores Alfas de la ciudad y del mundo, lo tienen todo a su alcance y aparentemente no les hace falta nada.
Kim Taehyung, heredero de la sabiduría y la gentileza de su mad...
—¿Ya se durmió? —interrogó el pelinegro una vez salió el omega de la habitación de su hermano.
—Sí, y me duele tanto verlo así, él no se merece nada de lo que le esta pasando —dijo con los ojos rojos queriendo llorar nuevamente.
—Ya lo sé cielo, pero mientras estuviste con él estaba pensando en algo, Yoongi mencionó que el doctor al que fue dijo que no volvería a ver, pero solo a visto a uno... consultaremos con otros especialistas para saber si se puede hacer algo por él.
—Eso no Jungkook, él no va a aceptar jamás tu dinero ni el de tu padre, y nosotros no podemos pagarlo.
—No te estaba preguntando, ahora somos familia, tú eres mi omega y él es mi cuñado, y si yo quiero ayudarlos pues así será, y mi padre tampoco se negara. Por favor, solo ya no llores mas, veremos que se puede hacer.
—Mh, está bien, gracias, supongo —Se acurrucó en los brazos de su alfa sintiendo su calor, la protección que siempre quiso sentir ahora la tenia justo ahí, con Jungkook, con quien menos creía posible llevarse bien si quiera—. No sé que haría sin ti.
—Harías muchas cosas a decir verdad, nunca me necesitaste para nada, así que no sé a que viene tu pregunta —bromeó dirigiendo su cabeza al cuello del omega, y este rio un poco mientras se abrazaba mas al pelinegro, dejándose marcar con su olor... y su boca.
—¡Jungkook! No me dejes marcas, luego tardan en quitarse —exclamó molesto al sentir la presión de los dientes del alfa en la piel de su cuello.
—Mi amor, un día te haré una marca que no se te quitara jamás, así que acostúmbrate —El castaño se sonrojo.
—Bueno, pero primero tienes un problema que solucionar mañana.
—No te preocupes por eso.
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—Entonces... ¿Estás terminando conmigo? —preguntó la omega junto a Jungkook, la cual fue citada por el mismo en la fuente del instituto, alegando que tenían algo urgente de que hablar.
Asintió levemente suspirando luego, minutos en silencio pasaron hasta que el alfa decidió hablar— Lo lamento Yuna, pero tú y yo sabemos que nuestra relación se estaba yendo en picada, y yo... no sé solo...
—¿Ya no te gusto?... ¿Ya no sientes nada por mi? —El pelinegro negó sin dudarlo, y con su cabello largo moviéndose con el viento de esa noche la omega habló— Está bien —pronunció, sorprendiendo al alfa—, en parte tienes razón, nuestra relación iba de mal en peor, así que en parte me alegra un poco ¿sabes? Yo... Dios esto va a sonar como una mierda, pero hace meses que deje de sentir cosas por ti, Jungkook, solo que no te lo dije porque a pesar de todo eres especial para mi, y no quería hacerte daño de ninguna forma y...
—Espera, ¿estás tratando de decirme que tú tampoco sientes ya nada por mi? —La omega asintió levemente— ¿O sea que continuaste con todo esto solo por mi? —volvió a asentir igual de contrariada que él— Y si en algún momento llegaba a pedirte matrimonio, ¿abrías aceptado solo por mi? —volvió a asentir— Estás loca.
