Teen Wolf | One Shots

53. Liam & Theo.

—¿Cómo están saliendo? —pregunté con mi mirada fija en el suelo.

—Pues creo que bien. Pensé que esto sería más difícil —admite.

—Es muy fácil.

Iba a agarrar el espejo para poder verme, pero su grito me interrumpió.

—¡Todavía no puedes ver!

—¡Liam!

—¿Qué mierda están haciendo que gritan tanto? —pregunto Theo bajando por las escaleras.

—Liam me está haciendo trenzas.

—Pobre de ti, Liam —se burló—. Si no te salen bien se va a enojar y va a hacer que se las hagas de nuevo.

—No lo escuches Liam, quiere que discutamos —fulmine a Theo quien solo guiñó un ojo.

—Por primera vez le creo —se rió—, eres así.

—No es cierto —ambos respondieron "Si como no".

Hace 3 meses yo insistí en que nos fuéramos a vivir juntos los 3, al principio ellos se negaron porque no se soportaban, ahora lo hacen un poco, pero es divertido cuando pelean, así que los convencí y nos mudamos a la casa que antes era de mi mamá.

—Mejor pide una pizza —dije sonriendo, tenía ganas de pizza.

—Sí, sirve para algo de una vez —pude imaginar a Liam con una cara maliciosa.

Theo rodó los ojos y fue a la cocina.

—Ya está —me ayudo a parame del suelo y me paso el espejo.

—Te quedaron muy bien —admiré su trabajo—, me encantan. dedícate a esto.

—Llega en 25 minutos —Theo salió de la cocina y se sentó en el sillón seguido de Liam.

—No me dejaron espacio —hice un mohín con los labios, ambos se pegaron a las esquinas del sillón dejando un espacio libre entre ellos—, gracias.

Pusimos una película en lo que esperábamos hasta que llegó el repartidor. Yo iba a salir, pero ambos negaron diciendo que podía ser un repartidor asesino.

Que raros.

—Esto está delicioso.

En cualquier momento iban a pelear por la última rebanada de pizza.

—Mañana podemos ir a los bolos —propuse.

—Sí, sería bueno salir, no haces nada en todo el día —Theo me miró.

Rodé los ojos y volteé a ver a Liam.

—¿Tu qué opinas? —vi su mirada toda seria viendo un punto fijo— ¿Qué pasa?

—Solo queda una rebanada —antes de poder reaccionar la agarró rápidamente y metió un buen cacho a su boca—, yo la quiero.

Theo se levantó y se colocó atrás de él agarrando su boca tratando de abrirla.

—¡Escúpela! —gritó.

Me reí mucho, me recuerda cuando un perro se come algo que no debería y tienes que sacárselo de la boca.

Liam tragó y miró a Theo con diversión y orgullo.

—Me la comí.

—Te odio —ambos se vieron con caras asesinas.

—Ay, ya bésense idiotas, bien que tienen ganas —les guiño el ojo.

—¿Estás loca? No sé si puedes notar que nos odiamos —Liam se señaló así mismo y después a Theo.

—Eso no dice esta foto —busqué en mi celular la foto para después enseñárselas con una sonrisa de victoria. Liam y Theo estaban con los brazos entrelazados afuera de la comisaria, ambos al verla parecían se pusieron pálidos.

—¿De dónde sacaste eso? —me vieron alarmados.

—Tengo mis fuentes —me encogí de hombros.

—Dame eso —Theo hizo el amago de arrebatar mi celular, me paré rápido y empecé a correr por las escaleras—. Bórrala... además es editado.

—Para mí se ve muy real Thiam —me burlé.

Todo iba muy bien hasta que me tropecé justo cuando iba a entrar a mi cuarto.

Literalmente bese el piso.

Sentí un peso caer encima de mí, Theo se había tropezado con mi pie.

—Me duele —me hice la sufrida.

—¿Están bien? —Liam nos preguntó mientras se comía la rebanada de pizza.

—Una marmota cayó sobre mí —lloriqueé.

—Sino te cayó Liam encima —sin poder evitarlo me carcajeé—. ¿Qué? Es la verdad.

—Ja Ja Ja que graciosos —Liam nos vio mal.

Y así era casi todos los días.

Tengo la sensación de que esperaban un trío.