¡Ella No Es La Indicada! [RenMin/JaeJun](Omegaverse)

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Los fines de semana, RenJun se queda a dormir en la casa de Jaemin para su tiempo de caridad como "mejores amigos". Se había vuelto una costumbre entre ellos dos quedarse los fines de semana a dormir en la casa del otro, lo hacían desde que tenían doce años y hasta la fecha seguían haciéndolo.

Los padres de RenJun no tenían ningún problema en dejar a RenJun quedarse en la casa de Jaemin, ellos conocían perfectamente al menor y sabían que él cuidaría bien de su hijo, además de que el Alfa sería incapaz de hacerle daño o lastimarlo, confiaban en él.

Por otro lado, los padres de Jaemin tampoco tenían problema alguno con aquello, ellos adoraban y querían mucho a RenJun, lo consentían más que a Yuna y eso que ella es la princesa de sus padres, incluso cuando Jaemin les confesó que gustaba del mayor, ellos también le confesaron que querían que RenJun fuera su novio.

Se sintió muy avergonzado, pero entendía a sus padres, RenJun era todo un amor de persona, excepto cuando se enojaba, porque parecía ser el mismísimo diablo, pero aún así, RenJun era una de las personas más dulces, lindas y extraordinarias que había conocido. Por eso mismo le prometió a sus padres que siempre lo cuidaría y lo protegería de todo.

— Yuna, mi amor — La rubia detuvo sus pasos para dirigirse hacia la cocina, donde su padre KeonHee se encontraba.

— ¿Si, papá? — Yuna le hizo ojitos a su padre, mientras el mayor se daba la media vuelta para ver a su hija con una enorme sonrisa en sus labios.

— ¿Puedes ir hablar a RenJun y Jaemin para que bajen? — Preguntó, dejando un tazón de fresas con crema frente a su hija — Esto es para ti — Dijo, acercándose a la frente de su hija para dejarle un beso.

La Omega asintió frenéticamente con su cabeza, formando una sonrisa en sus labios y abrazar fuertemente a su padre antes de tomar el tazón e irse a la habitación de su hermano mayor.

— Gracias, papá — Dijo. El Alfa negó, acariciando suavemente el largo cabello de su hija — Cierto, ¿sabes dónde esta mi papá SeoHo? — Preguntó, haciendo un puchero con sus labios.

— Mmm... creo que está en el jardín, ¿por qué? — Preguntó, mirando curioso a la Omega.

— Bueno, y-yo... ¿quería saber si me dan permiso para ir a la casa de RyuJin? — Preguntó — Es que hará una pijama y todas mis amigas irán. Yo también quiero ir, papí~~ — Yuna junto sus manos en son de súplica y formo un tierno puchero con sus labios, para conseguir que su padre le diera permiso. — Por favor...

KeonHee fingió pensarlo, colocando sus dedos sobre su barbilla mientras miraba a su hija menor hacerle pucheros.

— Pregúntale primero a tu padre SeoHo. —Dijo. —Si él dice que sí, irás y si él dice que no, no quiero ningún berrinche, Yuna.—Sentenció. 

Yuna asintió sonriente y tomo el tazón de fresas entre sus manos.

—Iré a decirle a mi hermano que baje con RenJun. — Avisó.

El castaño asintió, mirando como su hija se iba hacia las escaleras para ir en busca de su hermano mayor.

[...]

—¡Eres un tramposo, Jaemin!. —Chilló el Omega, mirando indignado al Alfa, mientras este reía.

—Lo siento, dulzura, pero todo se puede en este juego.—Dijo, sacándole la lengua infantilmente a RenJun.

El Omega se cruzó de brazos, frunciendo el entrecejo y desviando su mirada hacia otro lado.

—Ya no quiero jugar. —Dijo —Estoy molesto contigo, así que no me hables.