Tp.2 Cap.16

800 41 13
                                    

Cena familiar
BC

Me maquillo mientras Butch hace hondas a las puntas de mi cabello, el cual ahora noto que está un poco más largo que antes.

— ¿Cómo están tus muñecas?— lo miro de reojo por el espejo.

— Están bien, no importa.— no les da importancia. Pero a mí sí me importaba, estaban lastimadas por la presión contra las sogas.

Sigo con mi maquillaje, tapo mis ojeras con corrector, sombreo mis párpados con una sombra neutra negra y aplico brillo labial en mis labios; justo cuando Butch deja mi cabello para desconectar la plancha.

— ¿No te falta nada?— me mira mientras abrocha los botones de las muñecas de su camisa negra. Muerdo mi labio al verlo tan arreglado, aunque me gusta aún más el Butch de todos los días.

— No, ya estoy lista.— sonrío un poco levantándome de la silla y camino hasta la mesita de noche para agarrar mi celular.— ¿Me lo guardas?— se lo tiendo para que lo guarde en uno de sus bolsillos. El lo acepta, metiendolo en el bolsillo delantero de su pantalón, y vuelve su mirada a mí.

— Será mejor que ya nos vayamos, o no me voy a resistir en arrancarte esa ropa.— caraspea agarrando su saco y lo ubica en su hombro.

— No es mala idea, así no vamos a esa cena.— se ríe de mi comentario, pero yo me mantengo seria ya que hablaba en serio.

BT

— Ya llegamos, Sr. Him.— avisa el chófer.

— Sr. Him.— repite para reírse. Yo la admiro sonriendo. Pero para cuando se da cuenta de mi mirada, empuja mi cara con su mano.

— Gracias, Ed.— le agradezco abriendo la puerta por Butter, ella sale y yo la imito. Cierro la puerta de la limusina cuando ya estoy fuera, me enderezo arreglando el cuello de mi camisa aún con el saco colgado en el brazo. Nuestra mirada está en la mansión de mi, excéntrica, tía.

— ¿No es algo...

— ¿Exagerado? ¿egocéntrico?— la interrumpo con una mueca de desagrado. Solo basta con mirarme para saber que era lo que ella también pensaba.— Entremos...

Nos dirigimos a la puerta para adentrarnos a la casa, solo un pie adentro y las miradas de los tantos invitados recaen en nosotros. Levantan sus copas, como si lo hubieran programado, y me sonríen.

— ¡Feliz cumpleaños!— exclaman al compás. La música clásica de fondo se hace presente dejando el ambiente más tranquilo, y de dos puertas salen meseros con bandejas de plata en una mano, lo cual me molesta. Era un festejo, no una cena de negocios.

— Lucen emocionados...— se ríe nerviosa— ¿Por qué tú no lo estás?— me mira, transimiéndome serenidad.

— Mi cumpleaños no es la festividad que más me gusta.— le sonrío divertido, para animar el ambiente antes de que se vuelva uno deprimente por mí.— Señorita,— tomo su mano y ella se ríe por el tono de voz que uso para hablarle,— ¿le gustaría acompañarme en esta velada?— arquea una ceja.— tengo curiosidad en saber qué vamos a cenar.

— Oh, me encantaría Sr. Him.— cambia su tono de voz a uno suave y calmado, más se ríe por llamarme como a mi padre.

— Si sigue diciéndome así, no tendré más remedio que explorar la casa y con ella, debajo de esa falda.— mis ojos vagan por su cuerpo, hasta que ella me golpea el hombro sin utilizar fuerza, haciéndome reír.

— Todo va a salir bien, mientras no...— una figura instantáneamente reconocida para mis ojos, se acerca a nosotros con una sonrisa exagerada, que hace que sienta un frío húmedo en la espalda. A su lado puedo notar a una joven, cabello y ojos blancos, podía reconocerlas a ambas.— vamo..

𝔄𝔪𝔦𝔤𝔬𝔰 𝔠𝔬𝔫 𝔡𝔢𝔯𝔢𝔠𝔥𝔬𝔰 +18Where stories live. Discover now