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Seguramente lo que estoy a punto de hacer es una locura pero...no me quedaba de otra, si no entro a esa casa él seguirá secuestrando a más mujeres y lo hará hasta que el pedazo de idiota muera.
Mamá estaba en su turno, llegaría hasta en la mañana. James había salido, lo sé porque lo estuve espiando la mayoría del tiempo.
Tomé una linterna y otras cosas que creeí necesarias.
🥀🥀🥀
La calle estaba desierta, caminé rápidamente hasta la puerta de atrás de su casa. Saqué un pequeño broche y traté de abrirla.
—Vaya, al menos ver películas sí funciona — susurré
Finalmente entré. Estaba en total obscuridad, saqué mi linterna y mi teléfono, para poder grabar algo.
—Vaya, tiene buena gustos en muebles — susurré mientras seguía avanzando.
Había un segundo piso pero no le di importancia, nadie pone algo en el segundo piso. Seguí caminando, y me topé con un pasillo, y en medio había una ventana, me asomé y se veía perfectamente hacia casa.
—Vaya, éste piso está medio raro — comenté mientras me incaba
Puse mi oreja en el piso, pero no oía nada, hasta que toqué varias veces.
—¿Hola? — pregunté
Ese piso era diferente al que estaba en el resto en la casa. Me paré para poder buscar una puerta, busqué entre las paredes o algún acceso en el piso pero no había nada.
—Algo tiene que haber por debajo
🥀🥀🥀
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—Descuide, no pondré cargos, ya saben como son los jóvenes de hoy, se emborrachan
Evangeline no pudo hacer nada, James había llegado a la casa.
—Le pedimos una disculpa — comentó finalmente el policía Reeves mientras metía a la chica en el carro del policía
Evangeline estaba enojada, ella sabía lo que sucedía en esa casa y aún así aún no puede hacer nada. Llegaron a la estación de policía y en compañía del policía Reeves, la llevó a su oficina.
—Si ustedes no hubieran llegado quizás hubiese encontrado algo — comentó de repente mientras se sentaba en un asiento
—Se salvó de tener cargos...
—Evangeline
Reeves frunció el ceño
—¿Es usted la de los correos?
Ella solamente asintió
—Vaya, usted sí que fue demasiado lejos
—Al menos más que ustedes, sí — respondió
—Todo ésto lleva un proceso, Evangeline, no puede simplemente ir a su casa y ya
—Algo había ahí, se lo aseguro — pausó — el piso de un pasillo era extraño, no sé, algo tiene ahí abajo, deben ir.
