Cap. 17._ Cecilius Segmund.

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Los escombros de la pared salieron disparados por los aires, golpeando a los nobles y caballeros a su paso.

La cortina de humo cubría la silueta del responsable por interferir en la reunión del castillo, pasos pesados que provenían del humo y la imagen de un hombre se aclaraba mientras más se acercaba y salía de la cortina.

[Reinhard: ¿?]

Sorprendido al ver de forma clara la imagen de aquel hombre, Reinhard dió un paso en frente tomando de la empuñadura de su propia espada atada a su cintura.

Todos los presentes que estaban en la sala, intentaron retirarse en pánico o al menos los nobles.

Los caballeros vlandieron su espada ante el atacante y Julius, Félix y otros cubrieron a las candidatas.

La tensión en la atmósfera fue abrumadora, dos hombres con un gran poder estaban frente a frente.

Recargando su espada sobre su hombro, el hombre sonrió de forma entusiasta.

[Cecilius: Continuemos con nuestro duelo Santo de la Espada-san.]

En medio del caos que ejerció el hombre hablaba de forma tranquila y feliz al ver a Reinhard.

Reinhard no respondió.

Tomando con su muñeca y tirando de la espada en su cintura.

La gran imagen de la espada del dragón Reid hizo presencia a los ojos de las personas.

Lo hoja de metal de la espada brillaba de forma majestuosa como el mismo sol.

[Subaru: ¡Reinhard!]

Subaru quien estaba a unos metros por detrás de él, grito su nombre e intento acercarse a Reinhard.

Sin embargo, una mano con la palma abierta lo detuvo.

Reinhard ladeó su cabeza y miro a Subaru.

[Cecilius: Bien... ¿Comenzamos?. "Flexionando su rodillas".]

Cecilius dió un gran salto hacia Reinhard.

Dando un corte de forma horizontal con su espada, está chocó contra la de Reinhard.

Una gran brisa de aire fue provocada por el choque entre sus espadas.

Y segundos después el intercambio de espadas surgió, uno tras otro era tan poderoso que destruiría un muro sin problemas.

[Reinhard: ¿?]

[Cecilius: Sorprendido? Está espada está siendo reforzada por mi prana con cada golpe que doy vuelvo a reforzarla.]

La espada de Cecilius era considerablemente más débil que la de Reinhard, por eso tenía que reforzarla para que está no fuera partida a la mitad por la espada del dragón.

Pero había un pequeño detalle que Reinhard no dejo pasar.

[Reinhard: Si continuas así tú cuerpo pronto se quedará sin prana.]

La cantidad de prana que Cecilius empleaba para mantener su espada al nivel de la espada de Reinhard era abrumadora.

Sin embargo el brillo en sus ojos llenos de determinación y su fuerte voluntad de pelar no se desvaneció o vaciló ante la afirmación del Santo de la Espada.

Cortes poderosos surgían del impactó generado por sus espadas.

La velocidad que empleaban en sus movimientos iban más allá de lo que Subaru había visto.

[Cecilius: En verdad es impresionante. "Cecilius dió un golpe de altitud". Tu título en verdad no es una broma, tu fuerza es digna de el.]

Re: El inicio de un nuevo mundo (Re: zero)Where stories live. Discover now