Y seguiré... ¡ESCRIBIENDO!

CAPITULO 4

—¡Sara! —grita la pequeña Luz, desde la mesa que comparte con Alicia.

Me acercó a ellas con una sonrisa y saludando con la mano.

—¡Hola, niñas! —saludo.
—Sara, tienes que probar los pastelillos de queso y fresas —dice emocionada la pequeña Luz.

—Eso haré, peque. Voy a buscarlos
—le digo a Luz.

Antes de alejarme, escucho a Sonia preguntar algo acerca de si ya les llamo mamá.
Me encaminó al mostrador de pastelillos, y mi atención es captada por los diversos colores y formas de cada uno de estos.

—¡Buenas tardes! —llamo la atención de la joven de el otro lado. Quien me mira analizando cada parte de mi cara. —Me puedes dar...cuatro pastelillos de queso y fresas, por favor. —le pido amablemente, a lo que ella me sigue mirando, pero ahora de manera arrogante.

—¿Sería todo? —me pregunta, después de unos segundos. A lo que solo asiento, tratando de hacer como que no se el porque la jóven, me miraba tanto. Trato de evitar recordar las estúpidas decoloraciones blancas a un costado de mi barbilla, y en mi frente; que habitualmente cubro con el tonto fleco, pero que esta vez he dejado al descubierto, pues no recordé cubrirlo después de la consulta.

Pago los bocadillos y decido que es hora de irnos, así que voy por la chicas y le informo que ya es hora de irnos, considero mentirle a acerca de las razones, ellas me creen y nos encaminamos a dónde está estacionado el auto.

—Habló mamá, dijo que tardarían dos o tres días más, pues se tienen que trasladar a otro lugar —informa Alicia.

—De acuerdo, ya le llamaré para informarle acerca de la consulta luego, dile por mensaje, por favor, Alis. —pido mientras conduzco hacia la autopista. Alicia asiente, sumergida en su móvil.

Sonia parece aburrida, así que la invitó a poner un poco de música, hacemos una votación democrática y decidimos poner a Twenty One Pilots; mientras conduzco, me sumerjo en pensamientos de lo grandioso que ha sido conocer esa banda, aveces no te das cuenta de la increíble ayuda que recibes por parte de la música, tan solo unas cuantas canciones pueden dar la inspiración para seguir en la basura que vivimos, siendo está nuestra sociedad; y Twenty One Pilots ha sido mi más grande inspiracióno mejor ha sido mi reconforte, su historia, sus letras, todo.

Empieza a sonar Truce, del álbum Vesel. Mi canción favorita, confirmo en mi pensamiento.
Me concentró en la letra...

I will fear the night again
I hope I’m not my only friend

Stay alive
Stay alive for me
You will die, but now your life is free
Take pride in what is sure to die.

Stay alive... Mantente con vida, pienso para mí.

***

—Asi es mamá, exacto... De acuerdo. Si. Ajá sí todo de mi parte —digo lo último rodando los ojos; pensé que la llamada a mamá sería más corta, pero por lo visto mamá pretende hablar toda la tarde. —Si, mamá. Entendido. Vale, cuídense, saludos a papá. También los amo. —por fin mamá termino la llamada, y se despido.

Ahora también a mamá le prometí que pondría todo de mi parte.—¡Genial! —digo en sarcasmo. Ojalá se dieran cuenta de cuan difícil es para mí. Detesto mi cuerpo, pienso.

Tomo mi móvil para revisar las notificaciones. Tengo las redes sociales abandonadas, otra vez. Pero son solo redes sociales. Veo que tengo un mensaje de Nahomi, la única amiga que tengo. Nahomi es la persona a la que más confianza le tengo. Abro el mensaje que dice: