Capítulo 37: Dolor

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Siento que me falta el aliento y que en cualquier momento me voy a desmayar. No puedo entender porque siempre las cosas tienen que pasar de esta forma, porque siempre nos tienen que descubrir así.

Nuestros padres nos observan con rostros estupefactos, mi madre no deja de abanicarse con la mano y él señor Choi parece que explotara en cualquier momento. Minho a mi lado esta con la boca abierta sin poder pronunciar alguna palabra.

Tierra trágame y no me dejes salir nunca.

— Te lo podemos explicar. - logra decir Minho.

Ahora si creo que el señor Choi va a explotar, su rostro se vuelve un poco rojo y aprieta los puños.

— ¿Explicar? ¡¿Como mierda me vas a explicar esta estupidez?! - finaliza gritando que terminó dando un pequeño brinco en mi lugar por el susto.

Está demasiado enojado y juro que jamás lo había visto de esa forma a tal punto que realmente me asusta. Observo a mi madre que parece haberse recuperado tan solo un poco de la impresión que le hemos causado, sus ojos se encuentran con los míos y me parte al notar la decepción en ellos. Mi vista cae a mis manos y siento que en cualquier momento voy a llorar.

— No es una estupidez. - escucha decir a Minho a mi lado.

— ¿Te estás escuchando? - dice el señor Choi. - ¡Son hermanos! - grita. - Por dios, esto es una tontería, pensé que era una broma de Yoon Ah y no le he podido creer hasta verlo con mis propios ojos ¡Joder!

— No somos hermanos. - dice Minho con firmeza.

Levantó la cabeza y observó al señor Choi que cada vez se pone más rojo, a mi lado Minho se mantiene firme en su posición, no le quita los ojos de encima a su padre mientras continúa hablando.

— Lamento que te hayas tenido que enterar así padre, pero no voy a negar ni mucho menos dejar lo que tengo con Tae porque según para ustedes no es 'correcto'. - hace comillas con lo último dicho.

— Deja de decir estupideces Choi Minho. Ustedes dos no pueden tener nada, son hermanos maldita sea.

— ¡No lo somos, no somos de la misma sangre! - gritó Minho.

— ¡Legalmente lo son! - respondió de la misma forma.

— Eso no importa. - gruñe Minho y me tomó de la mano con fuerza. - No dejaré a Taemin. Yo lo amo.

Veo el rostro de mi madre palidecer y él padre de Minho solo se enoja mucho más.

— ¡Basta! - grita y otra vez tiemblo. - Esta estupidez va acabar. Te casaras con Yoon Ah quieras o no u Taemin se ira a Estados Unidos y terminara ahí sus estudios y hasta que ninguno de los dos supere este estúpido 'enamoramiento' no se volverán a ver.

Sus palabras suenan en mi cabeza y se clavan en mi pecho como un millón de cuchillos, las lágrimas retenidas comienzan a deslizarse por mis mejillas.

No quiero esto.

Simplemente no quiero esto.

— No. - hablo por fin justo cuando Minho iba a despotricar.

— ¿No que? - se dirige el señor Choi a mi. - No estás en posición de decir nada Taemin.

Lo observo y siento que estoy viendo a otra persona. No estaba ese señor generoso que me deba chocolates cada vez que iba a casa a ver a mi madre, no está ese señor amable que me transmitía confianza, ya no está, es un completo desconocido.

— No iré a Estados Unidos, usted no puede decidir por mi.

— ¿Seguro de eso? - dice y mira a mi madre. Ella me observa solo por unos segundos para luego mirar a su marido.

Eras Tú (2Min)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora