Culpa de los Celos /Kevlex y Tú/ [AP #2]

🌼 S i e t e 🌼

[Narra Tn]

Escuché voces en la planta baja de la casa y hubo una que reconocí inmediatamente, era él, era Kevlex, había venido a buscarnos.

Varios diálogos más y escuché como cerraban la puerta de golpe y baje las escaleras.

—¿Era él, mamá?— pregunte pisando el último escalón.

—Si, era él— dijo en un tono de voz muy pero muy frío y distante.

—Y... ¿Qué le dijiste?— pregunte temerosa de su respuesta o incluso de que me llamara la atención.

—¿Eso te importa? ¿Aún te importa ese malnacido?— camino rumbo a la cocina.

—Mamá, quieras o no él sigue siendo mi esposo y... Aún lo amo...— la seguí.

—¿Aún lo amas? ¿Después de lo que te hizo?— se giro para verme. Asentí, tal vez era una tonta por quererlo después de todo —¡¿Entonces por qué no te largas de aquí?! ¡¿Por qué no regresas con él?!— algo estalló dentro de ella —¡Anda, lárgate! ¡Lárgate y no vengas a llorar cuando te haga algo mucho más grave!— entro papá con Addison en sus brazos.

—¿Mami que pasha?— pregunto mi niña muy asustada.

—¿Qué son esos gritos?— pregunto mi padre mientras me entregaba a Addison.

—Nada, papá, no te preocupes— volteé a ver a mamá y susurré un “Lo siento” —iré a mi habitación, tengo que ducharme y duchar a la niña también, que tengan bonita tarde.

—Esta bien, mi niña— papá beso mi frente.

Salí de la cocina y fui directo a mi habitación, escuché como papá le preguntaba a mamá la razón de sus gritos histéricos y ella le contaba todo lo sucedido.

Después de duchar a Addison decidimos tomar una siesta hasta la hora de la cena, estaba tan cansada y dolorida que solo quería descansar hasta que mis energías se recargaran por completo.

(…)

Desperté por el sonido del celular al recibir una llamada.

Era él.

En la llamada

—¿Tn?— se escuchó la voz de Kevlex del otro lado de la línea.

—¿Si?

—Necesitamos hablar, por favor déjame verte— imploró.

—Te deje escrito en aquella nota que no nos verías por un tiempo, tal vez puedas hablar por teléfono con la niña pero no la verás— le dejé en claro.

—Esta bien, pero no me daré por vencido— dijo en tono decidido.

—Haz lo que quieras— colgué, no iba a caer tan fácilmente.

Me levanté y baje a la cocina dejando a Addison aún dormida.

Mamá y papá se encontraban viendo un programa de no se que cosa en el televisor de la sala.

Tomé una manzana y un tazón con cereal para llevarle a Addison y subí de nuevo a mi habitación.

Apenas coloque la comida en la mesita de noche sentí unas fuertes náuseas y corrí directo al baño, vacíe lo poco que había en mi estómago, baje la tapa del retrete y me senté sobre ella mientras limpiaba mi boca y jalaba la palanca para que el agua se llevará todo hacia el drenaje.

Toque mi vientre no tan abultado y recordé ese día en el que nos dieron la noticia de que venían dos bebés en camino, estaba tan feliz y contenta que no me imaginaba lo que sucedió después.

—Solo espero que su padre haya cambiado antes de que lleguen a este mundo, mis niños— susurré.

Holiiiiiiis

¿Cómo estan?
Espero que estén super, super, super, supeeeer bien.

Aquí les dejo otro capítulo, espero les guste

Los amo mucho bebus

Gracias por leer

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