CAPÍTULO 7

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POV. DESCONOCIDO [M]

—¿Acaso estas loca?. Como diablos vienes y matas al primero con el que te cruzas.
—Quisiera decir que lo siento y todas esas tonterías, pero sin embargo, sabes que no es así, no?
—Y si alguien te veía mientras lo hacías, o si ella pudo leer tus pensamientos... Sabes lo que significa!
—Tranquila, despreocupate porque en estos momentos hay algo, más bien alguien que está bloqueando sus sentidos y se muy bien quien es.
—Eh? Pero que dices, sabes bien que ella no es capaz de amar, no después de to...
—No!. No te atrevas a decirlo.
──Pero acaso estas olvidando que ella puede hacer mucho más que tú?
—Y tu has olvidado que soy yo quien la está controlando, y no me tientes, sabes perfectamente de lo que soy capaz.

No se que se cree hablándome a mi, ella no es quien para cuestionar mis planes, no es nadie para decirme que debo hacer.
Se perfectamente lo que hago y porque lo hago, solo de pensar en ese momento mi ira aumenta más y esta tendrá como frutos la muerte de cada una de las personas que se encargaron de arruinarme, me convirtieron en un mounstro, eso es lo que soy y es lo que seré, es lo que seremos.

—Sólo vete y mantiene tu perfil bajo, sabes que nadie puede saber, ni siquiera "Él".
Aún está en mis planes y mis decisiones saber que haré con él.
—Solo no olvides que ella no es igual que tú o yo. Hizo una pausa. Es aún más peligrosa.

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ADLER.

Son las 8 de la mañana de un sábado, ya pasaron varios días desde Lucas, el funeral y Arlette.
Que por cierto veo todos los días en mi ventana mientras me dirige su fría y penetrante mirada, desde el día del funeral no hemos hablado de nuevo.

Como a dicho mi abuela, hoy no saldré de noche y no es cobardía, no lo es...
Nada más es que no quiero preocuparle, aunque ya todo está bien.

Después de ducharme y vestirme baje a la sala.
──Buenos días abuela, como has dormido hoy.
──Buenos días cariño, muy bien, gracias y tú que tal.
Mi abuela estaba preparando café mientras yo me sentaba en una de los tauberes frente a la mesa.
──Estoy un poco soñoli... No terminé de hablar ya que el teléfono de la sala sonó. Vaya quien será a estas horas?.
──Pues no lo sé, esta muy temprano. Mi abuela dijo con su ceño fruncido, mientras se limpiaba las manos con un trapo. Voy a contestar, espera un momento aquí.

Estaba como un zombie, anoche me quedé viendo películas en mi habitación, me acosté a las tres o cuatro de la madrugada creo.
Hoy es un sábado aburrido, sin salida o fiestas, estoy decidido que llamaré a mis amigos para invitarlos que vengan a casa.
Estaba sumergido en mis pensamientos cuando mi abuela entró a la cocina, tenía una expresión sería.

──Y, dime quien era abuela, imagino que era el reve...
──No. Su voz estaba fría. E-era tu padre.
──Abuela no hay porque bromear a estas horas.
──No lo hago!. Algo estaba mal, estaba totalmente sería. No creía al principio pero me dijo que encontró por casualidad donde residimos y que el otro fin de semana estará aquí.
Esto es un broma! No e visto a mi padre en... ¡Nunca!
──Dile que no pierda su tiempo en venir, que nadie lo necesita. Dicho esto me puse de pie y salí de la cocina.

Enserio tiene que venir justamente ahora, nunca supe quien era y no necesito hacerlo.

──Hey! Niño diva. Eh? Quien ah sido. En la ventana idiota.
──Arlette!? Que sorpresa. En realidad es sorpresa, siempre es callada y distante y es raro cuando me habla.
──Estaba tranquila pero tus demás de diva adolescente interrumpen mis cosas.
──Diva adolescente? Pero que te crees, soy un hombre y son mis dramas, digo... Mis asuntos. Pero que le pasa a esta chica un día es rara y el otro me habla.
──Si diva adolescente, como digas.

Esta chica es una molestia en cuanto a todo.
──Hey!. De nuevo ella. Te gustaría salir conmigo esta noche, quiero decir  hay una fiesta mía hermanos y yo iremos y pues ya sabes no nos gustaría ir sólitos.
Pdria jurar que sus labios se curbaron hacia arriba.
──Mi abuela no quiere que salga y no pienso desobedecer, además tengo tarea y prefiero acabar. Mentí, por alguna razón me sentía extraño y no quería ir, sus hermanos sólo se limitaban a mirarme cada vez que estaba cerca de ellos y no es que me intimidan, es solo incomodidad.
──Oh! Vaya es una pena que el niño de mami no quiera venir, de todas formas da igual.
──Espera, que te crees para hablarme así en primer lugar, y en segundo si iré.
Solo dio un encogimiento de hombros y se alejo de la ventana.

Pero que diablos se cree para venir y hablarme de esta manera, le enseñaré lo hombre que puedo ser.

"sin embargo aveces soy ingenuo y no esperaba eso"

Bueno al final eso no importa por el momento, ahora tengo que pensar en cómo saldré de aquí sin que mi abuela lo note.
Que desastre al final si parezco el niño de mami castigado.

──Adler. Mi abuela grito desde su habitación. Ven aquí.
Oh Dios! Y si escucho, no, no eso no es posible esta en el otro cuarto.
──Voy abuela, dame un minuto.
Me puse de nuevo mi pantalón de deporte y salí de mi habitación para donde estaba mi abuela.
──Querido hoy me toca servicio en la iglesia hasta las once, por favor no salgas mientras no esté.
──Ah! Lo había olvidado abuela, no te preocupes estaré aquí sin falta. Di mi mejor sonrisa, soy bueno mintiendo eso es de recalcarlo, un mujeriego tiene que aprender bien.
──No trames nada Adler Gastrell, sabes que me daré cuenta.
Es verdad mi abuela suele darse cuenta de todo y aun no se como es que lo hace, si es un don, un super poder o alguna habilidad que el señor le dio.
──Que va abuela, que no saldré puedes salir en paz.
Dicho esto salí de su habitación, es una ventaja que no vaya a estar, pero tampoco quiero que se entere que salí así que tengo que pensar alguna forma de escapar.

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