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↪𝘊𝘢𝘤𝘦𝘳í𝘢 𝘥𝘦 𝘓𝘰𝘣𝘰𝘴↩
̶N̶a̶̶m̶j̶i̶̶n



Esa noche era una de las más hermosas que alguna vez existió.

La diosa Luna cubría a todo ser viviente en esa parte del mundo con su manto de luz en plena oscuridad.

Brillaba tan fuerte, anunciando a todo ser el acto tan sagrado que pronto se vería llegar.

La Unión de dos almas.

Las nubes y estrellas acunaban sus alrededores, acompañando la, pero nunca opacandola, nada podría hacerlo, ni el mismísimo Sol que con su esplendor alumbraba cada extensión podría compararsele.

Un fuerte aullido de Licántropo arrasó kilómetros de tierra y montaña, cubierto por gruesas capas de árboles y céspedes.

Los animales callaron ante el fuerte aullido, solo los que pertenecían a aquella especie respondieron igual.

"Nos estan cazando", decía aquel mensaje.

Grandes y fornidos Alfas tanto jóvenes como adultos, corrían de vuelta a sus tierras, en donde sus parejas y crías se encontraban, desprotegidas.

Rápidamente llegaron y la imagen de hombres cazadores, acorralando y matando a su manada dió de golpe en la cara de los machos, mismo que no dudaron en mostrar los colmillos y lanzarse encima a desgarrar y matar a aquellos invasores.

Gruñidos, arañazos, mordiscos, golpes, sangre, gritos.

Ninguna de las dos especies estaba dispuesta a dar tregua, la sed de sangre entre ambos bandos se podía sentir en el aire.

Fué una noche sangrienta y trágica, principalmente para un joven Alfa.

El único sobreviviente de la manada.

Magullado y herido corrió a la ciudad, buscando algún lugar en donde poder encontrar refugio.

Cambió a su forma humana, miles de moretones, raspones y profundos cortes se podían ver con claridad en su presiosa piel desnuda acanelada.

No contó que en esa madrugada, al correr como alma que lleva el diablo a un callejón, viera a un chico de cabellos rosas preso en las garras de un sucio hombre dispuesto a tomarlo sin su consentimiento.

El lobo gruño con recelo y sin esperar un mínimo segundo más, se lanzó sobre el asqueroso hombre, no podía dejar a la vista su lado animal, aquello sería su perdición de ahora en adelante, por lo tanto, solo soltó fuertes puñetazos al rostro de quien se encontraba bajo suyo.

Se relajó bien pudo verlo inconsciente y con la cara hecha mierda, incluso peor que la suya y se levantó con cuidado, para finalmente ver al chico, sorpresa y pánico abarcaron su ser al ver al chico/niño de hebras rosadas encogido en su puesto, escondiendo su cabeza entre sus brazos y piernas, tiritando no precisamente del frío y arañando con fuerza sus brazos, dejando hilos de sangre bajando lentamente de estos hasta impactar con el suelo.

Relamio sus labios e indeciso se acercó lentamente al chico que parecía estar colapsando, y lo comprobó cuando tocó su brazo y el otro por instinto levantó su rostro, dejándolo mudó al ver tremenda belleza de ser, completamente pálido, con los ojos rojos e hinchados y boqueando sin poder respirar.

Ignoró por completo el hecho de incomodar lo con su desnudez y tomó al chico entre sus brazos, este por instinto se sintió atacado y empezó a gritar no tan fuerte, pues sus cuerdas vocales ya estaban demasiado desgastadas pero el lobo no se dejó intimidar.

- Calmate corazón, debes hacerlo para poder respirar, no pienso hacerte daño - mascullo cerca de su oído, utilizando una voz suave y tranquilizadora, lo suficiente para lograr su cometido, pues el pelirosa dudoso intentó calmarse, alejar los pensamientos y miles de alarmas de peligro en su cabeza y concentrarse en el calor de dos fuertes brazos rodeandolo, hasta que lo consiguió minutos después, en donde respirar ya no era una odisea y su cabeza ya en calma reposaba sobre el hombro del desconocido.

Y cuando ambas miradas por fin se encontraron correctamente, sintieron como las cosas cambiarían, ignoraron las condiciones en que ambos se encontraban, uno con las prendas rasgadas y el otro completamente desnudo y solo se centraron en el golpeteo de sus corazones, en la intensidad de la mirada adversa, aquella que bien podría superar la del fuego, hasta el punto de extinguirlo.

Un hijo de la Luna se había encontrado con el hijo de un ser despiadado, pero ninguno lo sabía, y tal como se esperaba, ambos sintieron la fuerte atracción y conexión, olvidando por completo, la pérdida de su manada entera y el hecho de ser drogado y casi violado.

Dos seres de mundos distintos se enamoraron en menos de 15 minutos, irónico ¿no?

[🥀... ]

Las cosas parecían sonreírle al joven de piel de porcelana después de conocer a Kim Namjoon, el hombre a quien le debía la dignidad y valor propio.

Seokjin no dudó en prestarle su pantalón que estaba casi hecho añicos pero que cubría perfectamente lo que debía cubrir al hombre esa noche, mucho menos en llevarlo a su departamento al saber que éste no tenía hogar, ambos tenían mucho que explicarle al otro aún si no fuera necesario, como por ejemplo el por qué Namjoon estaba desnudo y herido , al igual que por qué Jin estaba con un hombre así en la madrugada usando un uniforme de seguramente su Colegio.

Cosas se dijeron, y aunque ambos mintieron no pudieron estar más conformes con las respuestas que recibían del contrario al igual que del obvio interés que se demostraban sutilmente.

Al paso de los días ya se esperaba que estuvieran colados el uno por el otro, que Namjoon le hubiera pedido permiso para acortejarlo y SeokJin sin entender el porqué aquella pregunta, aceptara gustoso, disfrutando de aquella nueva experiencia entre ellos.



Me Shuparon El Kulo 😔👊 Vhope. CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora