La Epifanía de Belén Wytte y los 9 Colores Mágicos.

Introducción

Belén representa fuerza y voluntad una característica muy propia de nuestra protagonista. Ella es una chica de 18 años de una estatura promedio de 1.68 cm, su piel es de un moreno claro, sus ojos color miel, el cabello castaño con algunas mechas amarillentas y es bastante largo pues le da por la cintura, lo tiene algo ondulado además le encanta vestirse con una braga azul, usa medias de diferentes colores y tiene una actitud bastante despreocupada por la vida.

Lo que hace especial a esta chica y a su familia es todas las mujeres son brujas. La familia Wytte es la última de brujas que habitan en México, específicamente en estado de Sinaloa. La familia emigró de Europa en el año 1934 y se asentaron acá en una búsqueda más espiritual e intensa con la naturaleza.

Actualmente la familia está constituida por cinco mujeres. La matrona o madre de todas llamadas Sofía Wytte, tiene 77 años, pero es tan enérgica como una adulta de 30, su cabello es todo canoso y tiene baja estatura, su rostro desborda gentileza.

Ángela Wytte, es la hermana mayor, tiene 55 años, es muy alta mide 1.80 cm y es una mujer bastante estirada, rígida y gruñona, siempre tiene el cabello recogido y se viste con colores opacos, jamás se casó ni tuvo hijos.

Cassandra Wytte, es la hermana de en medio, tiene 44 años y a diferencia de su hermana mayor, Cassandra es muy dulce y apacible, es la madre de Belén. Lamentablemente su esposo la dejó cuando un día la vio levitar mientras meditaba en el patio de su casa. No es exactamente el prospecto de una madre ejemplar, pero hace cuánto puede.

Glinda Wytte, es la hermana menor, tiene 33 años, pero su actitud juguetona e infantil la ha hecho la mejor amiga de Belén, es la más parecida a su madre, de baja estatura y rostro gentil. Ella y Belén no llevan una relación de tía-sobrina sino como de dos amigas inseparables, ella ha sido más una madre para Belén que la misma Cassandra.

Todas las mujeres de la familia Wytte son brujas clarividentes, en los últimos cien años no ha nacido alguna bruja con cualidades distintas, son capaces de predecir eventos, pueden tener un contacto intenso con la naturaleza y criaturas que habitan en los jardines, hablan de forma natural cualquier idioma y tienen una suerte excepcional por ello son muy adineradas y viven en excelente posición económica.

Residen en una gran mansión que a la vez es el negocio familiar, hacen teteras, todo tipo de teteras de cerámica, de latón, de bronce, de cobre y tienen decoraciones únicas, no hay nadie que les haga competencia y han vendido gran cantidad de sus artículos por todo el país e incluso han exportado. "La Mansión Wytte de las teteras"

Belén es una chica reservada, retraída y muy callada, no tiene amigos ya que nunca profundizó más allá del mero compañerismo que supone la escuela, al terminar la secundaria no se interesó por alguna carrera profesional, con todo el dinero que tiene su familia cree que es innecesario estudiar y trabajar, no le hace falta nada.

Tiene dos aflicciones muy fuertes, le afectan mucho más de lo que ella demuestra. El primero es que a sus 18 años no ha mostrado habilidad mágica alguna como sus tías, su madre y su abuela, es incapaz de tener clarividencia, no sabe meditar ni hablar con la naturaleza y ciertamente se siente muy poco afortunada. Y la otra es que su tía Glinda está muriendo.

Glinda tiene una grave enfermedad con la que nació, por años han contactado brujas curanderas alrededor del mundo y no ha habido solución alguna, solo han servido para prolongar un poco su vida, pero su estado de salud empeora cada día más y a nadie le duele más esto que a la joven Belén.