La Epifanía de Belén Wytte y los 9 Colores Mágicos.

Meteoro

Meteoro

- ¡vaya! ¡vaya! Sabía que eras tan tonta para venir nuevamente por tu amiguito- dijo Gladius quien estaba allí esperándola.

-míralo, aquí esta- dijo el gigante nuevamente mostrando a Puck en su mano semi-inconsciente-

-Belén...- pronunció el chico débilmente.

-su vida casi se agota, pero la espera valdrá la pena, con el poder de ustedes dos podré liberarme de esta prisión- decía Gladius con voz estridente y maquiavélica.

- ¿qué quieres decir con eso? - preguntó Belén.

-no maté a este niño porque sabía que alguno de ustedes vendría, si me los como obtendré un poder mágico sin igual que seguro será capaz de liberarme de este horrible lugar por el cual he vagado por miles de años- dijo el gigante.

-eres una criatura detestable y ruin- dijo Belén.

-me sorprende que estés aquí sin ese trovador estúpido ¿Acaso estas de cuerpo completo aquí? Creía que ningún ser vivo podría pasar esta tierra- decía Gladius mofándose.

- exactamente es así, pero yo no estoy tocando el suelo ¿no es así? - dijo Belén.

- ¡jajaja! esas alas estúpidas no te servirán contra mí- respondió el gigante.

- liberaré a mi amigo y luego pagaras con tu vida- dijo Belén.

- ¿sabes? Me quedaré aquí esperando a ver que puedes hacer, te recuerdo que tu magia fue inútil contra mí, dejaré que te agotes totalmente y te capturaré, quiero oírte suplicando piedad y benevolencia – dijo Gladius burlándose de ella.

Belén descendió un poco y se colocó frente al gigante, observando fijamente a Puck que se encontraba aún vivo, pero demasiado débil.

-Sabes, en esta travesía el mayor enemigo que tuve fue a mí misma, enfrente innumerables desafíos y criaturas espantosas como tú, pero he logrado salir victoriosa y es que siempre he tenido ayuda extra, ese niño que tienes allí como si fuese algo inservible es una de las personas más maravillosas que jamás conocí, y he aprendido mucho de él, su valentía y gallardía me han inspirado, pero ahora él me necesita a mí y te juro aquí y ahora que voy a rescatarlo- dijo Belén.

- ¿ah sí? Quiero ver cómo, bruja – dijo Gladius retándola.

-te reconozco como la criatura más poderosa que he enfrentado y que mi poder solo no basta para derribarte- pronunció la chica.

- ¿Y DIME QUE HARÁS ASQUEROSA BRUJA? - gritó retador e impaciente el imponente gigante.

-Yo Belén Wytte el miembro más joven de la familia Wytte, bruja de colores más poderosa que existe, invoco aquí y ahora el poder de mis ancestros, invoco aquí y ahora el poder de nuestro Dios regente-

El cuerpo de Belén empezó a brillar como si un arcoíris la rodeara, los creyones mágicos y su grimorio saltaron de su cinturón y se mantuvieron flotando al lado de ella, mientras ella recitaba las palabras.

-el color azul que me da el poder de la sabiduría y comunicación, el color verde que me da el poder sobre las plantas, el color rosa que me da la magia de las Hadas, el color negro que me permite proteger y atacar, el color rojo que tiene poder de invocación y control, el color amarillo que puede aumentar y anular la magia, el color naranja que me permite hablar con los animales y el color violeta que me otorga alas angelicales espectrales- mientras Belén mencionaba cada color ellos en el aire empezaron a dibujar un enorme pentagrama.