Capítulo 30 parte 4 "Medidas desesperadas"

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P.o.V (t/n) (t/a)

El inevitable destino estaba frente a nuestros ojos, no importaba cuantos gritos o amenazas escucháramos, era claro, no nos rendiríamos tan fácil, aunque ver a Togami ser herido de forma tan injusta y cobarde fuera doloroso, aún mantenía aquella mirada segura y decidida, la llama de su orgullo y espíritu no se apagaba, en su lugar, esta avivaba su calor y agresividad, donde yo, como mínimo debía ser capaz de mantenerme firme como respeto a las acciones de Byakuya.

Sin embargo, estaba llegando a mi límite mental ¿Cómo podía seguir viendo este absurdo espectáculo sin más? Estaba rindiéndome, deseaba desde el fondo de mi corazón que llegaran a auxiliarnos y salvaran a Togami, quizás esas eran mis primeras plegarias sinceras, quería que terminarán de atormentar a Byakuya, no me importaba mi persona, solo el bienestar de aquel chico quien se negaba a rendirse.

Cerré los ojos y todo se tornó oscuro, el silencio de mis pensamientos y aquel mundo aislado creado únicamente por aquella simple acción me permitieron ver otra perspectiva; voces lejanas y sonidos en eco, este lugar eran tan reconfortante por el hecho de separarme de la realidad, sin embargo, era increíblemente frío, tan helado que mi cuerpo pedía un poco de calidez para evitar tiritar.

Esa sensación, era el miedo mismo que intentaba negar y olvidar.

Fue entonces que, con un sonido estruendoso abrí mis ojos en señal de alerta y aunque débil, observé rápidamente la habitación en busca de respuestas, encontrándome así con lo que quizás sería nuestra oportunidad y salvación, aquella chica obsesionada por Byakuya quien reía ahora a carcajadas sintiéndose orgullosa de sí misma.

—¡Gya ha ha ha! ¡Cuánto tiempo sin vernos imitaciones de...— la chica de cabello largo y desarreglado detuvo su animada voz por unos momentos, su larga lengua dejó de moverse y sus ojos rojos cobraron una intensidad mayor, casi despiadada —No repetiré esta pregunta ¿Quién le hizo esto a Byakuya-sama? ¡Parece que alguien pide a gritos su muerte!

Aquella chica le reconocía, como la última vez que le vi, llegó en el momento justo para salvar al chico que más le interesaba, pero a diferencia de aquella momento, en esta ocasión, se veía increíblemente concentrada y con una verdadera sed de sangre.

—No es momento para que te comportes así, concéntrate, tendrás tiempo de vengarte si quieres después, pero recuerda...—haciendo uso de su autoridad frente aquella chica, Byakuya habló y poco después, al unísono se escuchó aquella frase que sería una promesa entre esa asesina serial y el heredero definitivo.

—No debe morir nadie.

Con una sincronización casi perfecta, Genocider fue demasiado veloz para los ojos de los guardias que le intentaron disparar, está corriendo de forma precipitada comenzó a desarmarlos uno a uno, dejando así libre a Byakuya poco después.

Togami se puso de pie y sacudió un poco su ropa, parecía forzar la vista por no tener consigo sus lentes pero, aun así, pese a tener rasguños en rostro y seguras heridas en su cuerpo, se mantuvo imponiendo de fuerza y autoridad en su clara desventaja.

Los hermanos de Togami al verse desarmados y en desventaja con aquella excéntrica chica de apariencia desalineada, regresaron cerca de donde Kazuya se encontraba, parecían estar haciendo una especie de formación donde buscaban cubrirse unos a otros. Fue en ese momento que el líder de todos esos hermanos, Kazuya Togami, sacó una pistola y apuntó en dirección Byakuya. Genocider se puso inmediatamente al frente del chico de cabello rubio protegiéndole, mientras que este solo movió su mirada en un intento de mantener contacto visual pese a que no pudiera ver del todo bien.

Inmediatamente al ver este comportamiento, Kazuya cambió su enfoque y cambiando la dirección de su amenazaba a mí, aprovechando que todavía no estaba liberada, me usó como una especie de amenaza, esto hizo que le observara con más intensidad y apretara los dientes en muestra de disgusto.

Danganronpa "Know the enemy" Byakuya x ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora