Historia de un amor

Verdades que duelen

Después de ese encuentro pararon 2 semanas, 2 semanas en donde no lo vi, no supe de él, dos semanas en donde espere saber de alguna forma si había cumplido su palabra. En esas 2 semanas mi padre solo hablaba sobre su trabajo, los actores que trabajaban con él y nada más. Ese día desperté con un mal presentimiento, algo me decía que ese dia seria el peor de mi vida. Después de la escuela, salí para televisa, había quedado en comer con mi papá después que terminara de grabar.

Llegue a televisa y fui directo al foro donde estaba mi papá, lo saludé cuando llegue y espere a que terminara. Mientras esperaba sentí hambre así que fui a la cafetería por algo light para engañar mi estómago hasta la hora de la cena. Cuando iba camino a la cafetería nos encontramos afuera de su camerino, me acerqué para saludarlo pero lo que vi me dejó sin palabras. César tenía los ojos hinchados, parecía que había pasado la noche llorando, y sin más lo abraze como queriendo borrar la razón de su tristeza.

El me devolvió el abrazo y así estuvimos por unos minutos. Cuando sintió que alguien pasaba por ahí me hizo señas para que entrara al camerino a lo cual yo obedecí rápidamente. Cuando estuvimos dentro, Cesar comenzó a llorar como un niño, yo no sabia que hacer ni que decir, lo unico que sentia era como mi corazon se rompia de verlo así. Me senté a su lado y solo lo abrace para que sintiera mi apoyo, lloro en mi hombro hasta que se calmó un poco y pudo contarme lo que pasaba.

Mi amor perdoname por favor

Perdonarte que, no entiendo Cesar explicate bien

Mi amor, hace unos días yo fui a casa de Leticia para terminar nuestro compromiso, pero cuando quise hablar, ella no me dejo y me dio una noticia que me dejo sin palabras

Que noticia Cesar, habla claro por favor

Mi amor Leticia me dijo que está embarazada

Que, - y sin poder evitarlo comencé a llorar.

Mi amor no llores, no me gusta verte así

Como quieres que no llore si me acabas de partir el corazón, será mejor que me vaya de aquí, hasta nunca Cesar Evora, - y salí corriendo de ahí lo más rápido que pude.

Como siempre el baño fue el único testigo de mi dolor, en ese mismo lugar donde hace unas semanas había dejado mis lágrimas, hoy las volví a dejar. Llore hasta que sentí que ya no podía llorar más. Cuando por fin se me acabaron las lágrimas, me lavé la cara y salí del baño. Caminé hasta el foro donde estaba mi padre, le dije que ya no quería ir a comer y que me iba a la casa, él se quedó porque tenía que grabar unas escenas más.

Llegué a mi casa y me encerré en mi cuarto, ese día no quise ni salir a comer. Lloré y me lamente el haberme ilusionado con un hombre imposible para mi. Esa noche no dormí nada, me la pase llorando y pensando en el. Cuando la mañana llegó, me sorprendió de rodillas en frente de mi cama, mirando al vacío y sin emoción ninguna en mi rostro. Cuando los rayos del sol me dieron, en ese momento decidí que ese sería el último día que lloraría por él, me lo arrancaría del corazón aunque fuera imposible. Después de ese día, él no existiría para mí, sería como si estuviera muerto.