Lɪᴇ ¦ ʜᴏᴘᴇᴍɪɴ

II

«-(Es interminable, incluso si trato de correr)-»

Gritos se escuchaban en toda la casa.

La señora Park estaba histérica ante lo que su hijo le había dicho.

No podía permitir un homosexual en la familia Park, eso arruinaría todo, acabaría con la perfección que por años han tenido.

―Mi hijo no es ningún marica así que deja de decir estupideces. Eres un hombre y con una mujer estarás, ahora fuera de mi vista antes de que me hagas hacer algo que no quiero ―hizo un movimiento con su mano.

Jimin simplemente se encontraba en shock, lágrimas resbalaban por sus mejillas y su cuerpo temblaba por la adrenalina.

Era la primera vez en 16 años que su madre le gritaba, sabía que no era buena idea revelar su orientación sexual pero su madre debía aceptarlo ¿No? ¿No era así como debía ser?

Corrió a su habitación y se refugió en ella, pasó la tarde llorando y apesar de recibir múltiples llamadas de Hoseok todas las ignoró.

―Solo es un error, un error ―repitió una y otra vez tratando de convencerse a sí mismo.

Podría estar simplemente confundido, sólo era eso, una confusión en unos días se le pasaría y su madre lo perdonaría.

Todo volvería a la normalidad.

Nunca antes había desobedecido y esa no sería la primera vez, si debía engañarse a sí mismo con tal de no tener problemas lo haría.

Thighs~