IX

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«-(No seas como una presa)-»

Ya había pasado unos días desde el encuentro con Hoseok.

Aunque al inicio se había reído de Jimin y todo eso de "escapar" luego notó que él chico realmente no sabía que hacer y esa era la opción más viable.

Hoseok se preguntaba como Jimin había terminado en aquella situación. Nunca cuestionó la extrema obediencia que le otorgaba él chico a su exigente madre, pero a ver la desesperación e infelicidad en su rostro no dudo en ayudarlo que lo que fuera, en este caso escapar.

El plan era simple.

Aprovechando la constante ausencia de su esposa arregló sus maletas, todo lo que estaba bajo su nombre o fue comprado con su dinero se lo llevaría. También transfirió el dinero que le pertenecía y estaba en la cuenta matrimonial a la suya personal.

Todo estaba listo excepto por una cosa, los papales de divorcio. Por días los estuvo ignorando pero ya era hora, le habría gustado hablar antes con Mina pero tal vez era mejor hacer todo en silencio.

Tomó un lapicero y firmó con su nombre luego de leer todo lo que se encontraba en los papeles. Al firmar sintio como si le dieran las llaves para abrir una jaula, pero aun no era libre, no hasta salir de aquella casa.

No quería alargar más su estadía pero debía esperar, Hoseok aún no llegaba y no se arriesgaría a permitir que los vecinos lo vieran con tantas maletas frente a su casa.

Estaba sentado en su sofa esperando algún mensaje o algo que indicará la llegada de Hoseok cuando el timbre sonó, ingenuamente pensó que era quien esperaba y no se molestó en revisar a través de la mirilla.

No era Hoseok.

Era su madre.

― ¿Que se supone que estas haciendo? ―la mujer de aura poderosa entró casi atropellando así hijo.

―M-madre ―su reacción fue automática, el miedo lo había invadido.

― ¿Te revelas? ¿Eres un adolescente? Pensé que ya no tenías esas actitudes patéticas que te caracterizan. Eres en Park, tu único trabajo es no arruinar todo con tus caprichos ―la mujer mantenía un todo de voz bajo y sereno pero que transmitía su enojo.

―Caprichos ―repitió con desdén, no pretendía enfrentarse a su madre pero que más da no tenía intención de volverla a ver ―. ¿Acaso ser feliz y tener decisión propia es un capricho? Es un deseo básico, nadie quiere ser un inseguro como yo que no tiene voz ni voto en nada madre, estoy cansado de ser un titere así que desde este instante acabo con el show que me has hecho presentar por años ―notó que su teléfono vibraba en su bolsillo, era Hoseok que ya estaba llegando ―. Por último, agradezco por todo lo bueno que alguna vez hiciste pero quiero que sepas que en el momento que pagaste para que me acosaran por mis gustó, en ese momento deje de sentirme como tu hijo.

Con esas palabras Jimin tomó sus maletas y salió dejando todo atrás.

Thighs~

Lɪᴇ ¦ ʜᴏᴘᴇᴍɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora