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Al abrir la puerta de la habitación Taehyung aún quería salir corriendo, y mantuvo sus ojos mirando el suelo mientras Hoseok lo llevaba hasta donde estaba NamJoon.

─ Por favor no te hagas tigre, por favor no te hagas tigre... ─comenzó a murmurar Hoseok por lo bajo al notar como tensaba la mandíbula, mientras lo seguía empujando hacia la camilla.

─  Tae, ¿Cómo estás? ─preguntó NamJoon en la voz más suave que tenía.

Taehyung se abrazó a si mismo con fuerza, sus garras hicieron presión sobre su piel e intentó concentrarse en ese dolor, en esos pinchazos sobre su cuerpo.

─ Oh, sacó sus garras─murmuró Hoseok, quien seguía detrás del híbrido y lo tomaba por los hombros, decidió apartarse.

─ Taehyung, no te hagas daño─el pelirrojo no dudó en salir de la camilla, sin importarle las cosas que estaban conectadas a su cuerpo, yendo hacia él para tomar sus manos y alejarlas de su cuerpo evitando que se lastimara.

El híbrido mordía su labio con fuerza y aguantaba las lágrimas.

─Oh, mi bebé─NamJoom lo abrazó y Taehyung se rompió de a poco, comenzando a llorar cada vez más y más mientras el humano lo consolaba con pequeñas caricias y palabras suaves.

Hoseok soltó un lloriqueo canino y se sintió avergonzado así que masculló una disculpa y tuvo que salir de la habitación.

─ Lo siento, ¿Sabes?

─Lo sé, Tae, y yo te perdono, ya lo hice hace bastante, ¿Eso sí sabes?─preguntó NamJoom, dejando mimos en su cabello y en sus orejas, el tigre negó como respuesta─. Te perdono, está bien, Tae─  dejó besos sobre su cabeza y el menor se sintió aún peor.

─No deberías hacer eso ─murmuró en una voz baja entre lágrimas.

─Y qué más da, Tae, no conozco otra forma de consolarte siempre lo hice así.

El híbrido no tuvo nada que responder, el humano se apartó de él para limpiar sus lágrimas con sus manos, encontrándose con los ojos del rubio que seguían llorando.

─Prometo que todo estará bien muy pronto, tigrecito.

NamJoon esperó hasta que Taehyung asintió y lo invitó a sentarse junto a él, colocando un silla junto a la camilla del humano.

Lo conocía lo suficiente como para saber que estaba decaído, así que tomo su mano, entrelazó sus dedos y la sostuvo durante toda la charla.

─¿Cómo estás TaeTae?

─Bien ─respondió con simpleza, sin mirarlo, tomó un minuto de silencio para que volviera a hablar

─ ¿Cómo estás tú?

─Estoy mejorando, ya dentro de unos días volveré a casa.

─  ¿Volverás?

─Claro que sí, no voy a morir aún, siempre voy a volver con ustedes, Taehyung─acarició su cabello, notó que el híbrido se había ilusionado con esas palabras por el brillo en sus ojos.

─¿De verdad volverías con nosotros?

NamJoon sonrió con ternura, el tigre alzó sus ojos hacia él y sintió lo mismo de siempre de nuevo, sintió ese cariño esa facinacion y curiosidad, esa necesidad de estar a su lado para descubrir cada detalle junto a él, lo quería, cómo no quererlo.

─Claro que sí, Taehyung─dijo, sin dudar, y con un tono calmado y sincero─. Son mis bebés, cómo no volver con ustedes.

Taehyung no pudo articular palabras y NamJoon vió las lágrimas acumilaste poco a poco en sus ojitos.

─Oh vas a llorar de nuevo, no...

Taehyung se levantó para abrazarlo por la cintura, escondiendo el rostro en su pecho mientras repetia por lo bajo:
─Te quiero, te quiero, te quiero mucho...

─ Yo también te quiero─correspondió NamJoon, ya le habían dado ganas de llorar y no pudo aguantar mucho más tiempo.

─ Yo también te quiero─correspondió NamJoon, ya le habían dado ganas de llorar y no pudo aguantar mucho más tiempo

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Back Luck «JIKOOK»Where stories live. Discover now