Capitulo 4: Razones

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El estruendo sacudía el castillo de Lionés en plena época del invierno a nivel de alertar a todos los guardias en el por causa de un histérico Meliodas y el golpe que diana le había dado en la cara de lleno, sin embargo no era lo suficientemente fuerte como para alterar la paz del resto del reino, no muy lejos del castillo a unos 50 metros por debajo de este se encontraba la zona comercial, llena de gente alegre, feliz y contenta por como se veía el futuro de su reino, decir que la paz había llegado a sus vidas era algo despreocupado.

El estruendo sacudía el castillo de Lionés en plena época del invierno a nivel de alertar a todos los guardias en el por causa de un histérico Meliodas y el golpe que diana le había dado en la cara de lleno, sin embargo no era lo suficientemente f...

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En una taberna oculta por los puestos a rebosar de gente a su alrededor entró, precisamente, la razón por la que creer en la paz era algo realmente necio por parte de todos, aun estando completamente agotado, alcanzo a sentarse en la mesa mas alejada de la entrada resoplando para mantener dentro de si el aliento que le quedaba.

..?: El cansancio se ira pronto pero... mi cuerpo estará fuera de si por unos días, supongo que esto es todo lo que puedo hacer por ahora, al menos se que ese chico no saldrá de aquí haga lo que haga (vaya suerte la suya).

La única encargada de ese momento era una chica de cabello largo y adornado con pequeños sujetadores a lo largo de el mismo, de un divino color azul cielo y ojos color violeta con grandes pestañas completamente naturales  vestida con ropa casual a causa de que normalmente nadie a plena luz del día visita el local, el sitio que el sujeto encapuchado había escogido alumbraba poco mas de la mitad de su cuerpo, como sería normal al ver a una persona cubierta de telas en mitad de la oscuridad la chica dio un pequeño brinco que fue controlado gracias a su experiencia en tratar a las personas en su local, se necesito de un movimiento de la mano de la persona encapuchada para lograr un verdadero terror en el cuerpo de la chica sin saber realmente el por que. 

..?: ¿No te importaría traerme algo de comer verdad?, no te preocupes por lo demás, solo estoy de paso -Respirando profundamente resultando en una gran cantidad de humo de calor generado por el frio de las afueras-.

Evelyn: ¡Por supuesto! -en tono alegre- ¡le traeré algo para aliviar el frio!

Respondiendo en completo silencio y acomodándose en su asiento la chica se apresuro llegar a la cocina y preparar lo encargado, el invierno volvía a todo el reino incluyendo ese pobre establecimiento en un polo norte en miniatura, pero la chica podía identificar sin ningún esfuerzo un frio muy diferente al que la época les estaba poniendo encima.

Evelyn: Aquí esta su comida, si se le ofrece algo, estaré en el mostrador... -dándose media vuelta para poner paso al mostrador-

..?: Nadie vendrá hasta pasadas las tantas de la noche... lo entiendes no?

Evelyn: ¡¿A que se refiere?!

Historias de capitanes [S]Where stories live. Discover now