Jasper Hale sin duda era todo lo que alguna vez soño tener a su lado, pero no contaba con todas las cosas que descubriria al conocerlo:
Leyendas e historias de terror sobre un mundo sobrenatural lleno de vampiros y hombres lobo.
Porque hay tantas c...
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...
Jasper se recargo en el marco de la puerta mirandome intensamente poniendome sumamente nerviosa. Sonrei acariciando el cabello de Jayden que se encontraba profundamente dormido a lado de su hermana, deposite un beso en la frente de ambos antes de ponerme de pie.
- ¿Todo bien? -Pregunte frente a el.
- Todo esta excelente - Sonrie antes de tomar mi cintura acercandome a su cuerpo y su mano libre acarició mi mejilla - Aun no puedo creer que esto sea real.
- Tampoco yo, tengo todo lo que siempre soñe - Sonrie una vez más antes de dejar un corto beso en mis labios para después ir hacia nuestros hijos.
Suspiré encantada.
No paso mucho tiempo antes de que fueramos directo a nuestra habitación, sus labios atraparon los mios con ansias mientras mis manos trataban de acercarlo lo más que podia a mi. Ahora que somos padres nuestra intimidad habia disminuido porqué teniamos otras cosas en que ocuparnos asi que suspiré de gusto cuándo sus labios bajaron por mi cuello haciendo un camino.
***
Hice una coleta a mi cabello mientras bajaba las escaleras oliendo el dulce aroma de panqueques. Tengo que recalcar que el don de Jasper para la cocina cada vez mejoraba más.
- ¡Buenos días! - Grite animada.
- ¡Buenos días, mami! - Ambos respondieron al unísono.
- Buenos días, cariño - Jazz dice con una sonrisa antes de que lo besara. Sonrei también antes de sentarme en medio de los niños.
- ¿Que hacen? -
- Haciendo nuestra carta para Santa - Ayleen dijo con una gran sonrisa levantando la hoja de papel llena de color, dibujos y mucho glitter.
- Porque ya viene navidad - Jayden habla con entusiasmo.
- Pueden continuar despues de desayunar - Jasper puso un gran plato frente a nosotros.
- ¿Me ayudaras? Porque iremos con Paul y amigos a la playa -
- ¿No preferirías quedarte conmigo? -
- Claro que no, papá - Ella suelta una pequeña risa.
