8. Vapor

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POV de Luke: 6:15 A.M. (El día siguiente de la llegada de Ashton a casa)

Me retorcí entre las sábanas junto a él, pasé mis manos por su espalda, lisa como una piedra preciosa y acaricié cada parte de su cuerpo. Él se estremeció alegremente y soltó un pequeño ronquido antes de girarse cara a cara hacia mí.

Le miré la cara, Ashton siempre decía que odiaba sus facciones, pero yo admiraba todo en él, para mí era perfecto. Le acaricié la mejilla y me incorporé en la cama, no antes sin pasar mi mano de nuevo por su ancho pecho y besarle la mejilla. Mi mente no podía dejar de pensar en él y en que, cómo pasamos de ser extraños a ser un cuerpo solo

Anduve por el pasillo a la luz del alba, estaba empezando a amanecer y los rayos de sol entraban lentamente por las amplias ventanas de la terraza. Llegué al cuarto de baño de la planta de arriba, seguido por Petunia. 

Encendí la ducha y al cabo de unos minutos, el vaho llenó la habitación con un abrumador olor a colonia. Empecé a quitarme la ropa y me metí poco a poco en la ducha, dejé que los pensamientos me culminaran por enésima vez la mente.

Mi pelo se empezó a mojar poco a poco y mi mente se vació. Apoyé las manos en la mampara de la ducha y dejé que el agua llenara gota a gota mi cuerpo, desde la cabeza a los pies. A su vez, pensé en todo lo que había pasado en poco tiempo, y me derrumbé.

Me enjaboné el pelo y metí los dedos entre aquel denso cabello de color rubio cobrizo. Abrí el grifo de nuevo y dejé que mis lágrimas se camuflasen con el agua que ya caía por mi cuerpo. Agotado, y sin apenas fuerzas me dejé caer al suelo, y miré hacia arriba, dejé que el agua me golpease la cara sin descanso. Respiré profundamente y traté de ordenar mis pensamientos que iban y venían en el interior de mi cabeza. Me levanté del suelo y giré el grifo, un torrente de agua fría llenó mis músculos de dolor, pero a la vez, rompió y quebró mi corazón. Rompí a llorar y perdí el control de mi mismo, seguía sin pensar por qué alguien como Ashton podía tratarme como yo era y no por mi fama, ni por mi dinero. Ambos éramos amigos desde mucho antes de yo conocer a Arzaylea, pero él desde el primer momento, tuvo algo especial. Sus ojos brillaban con la luz del sol, y su corazón resplandecía a la luz de la noche, junto con su cuerpo, esbelto, propio de los baterías. Otra vez, sin apenas aire, dejé que las lágrimas se apoderasen de mí. Mi garganta, rota de llorar apenas podía formular una palabra y mis sentimientos estaban muy nublados.

Salí de la ducha sin apagar el grifo y con sutileza limpié el vapor de la mampara, para después acariciar suavemente mi reflejo, la proyección de un chico que antes era feliz y no un desgraciado. Retrocedí unos pasos atrás y con mi mano derecha arremetí contra el espejo de la ducha, rompiendo una y otra vez ese triste reflejo, hasta que no quedaron más cristales y donde en ninguno se podía ver la horrorosa cara del que un día fue Luke Hemmings.

Yo no me consideraba nada, era un alma en blanco, con la mente alborotada y gris. Me senté en el suelo del baño, mirando a la ventana. Mi puño sangraba, al igual que mi mejilla derecha, donde tenía incrustado un pequeño cristal. Me incorporé y  me miré al espejo del lavabo, intentando no romperlo al igual que la mampara de la ducha. Poco a poco me saqué el pequeño cristal del que borboteó sangre muy densa y oscura. Me estremecí del dolor y volví a meterme en la ducha, clavándome algunos de esos cristales en la planta de los pies.

Gemí de sufrimiento y encendí el grifo de nuevo. Apoyé mi mano en el cristal restante de la ducha y llené de sangre el baño. No podía creer en lo que me estaba pasando, no era el mismo, y era culpa de ella.


POV de Ashton: 7:30 A.M. 

Me desperté sobresaltado por una llamada de Calum en mi teléfono. Me froté los ojos e intenté coger el teléfono lo antes posible

- ¿Diga? -  respondí con la voz ronca

- ¡Ash! - gritó Calum desde el otro lado 

- Calum, no grites, ¿sabes que me acabas de despertar? - dije

- Si, si, bueno - prosiguió - ¿Qué tal estáis los dos?

Me sonrojé, mi corazón palpitaba sin parar y un denso calor se apodero del interior de mi cuerpo

- Estamos bien, Cal - respondí - Estamos perfectamente

- Me alegro muchísimo por los dos, Ash - dijo Calum tiernamente - Realmente, siempre estabais hechos el uno para el otro.

Me reí nerviosamente y suspiré. Realmente estaba enamorado de Luke, salvo que podía expresarlo de maneras muy distintas a las de Luke. Él era muy callado, yo sin embargo, era espontáneo.

- Calum, tengo que colgar - dije - Voy a hacer el desayuno, ¿quieres pasarte después por casa? - le pregunté curiosamente

- Perfecto, allí estaré, Ash - Calum colgó el teléfono


POV de Luke:

Salí de la ducha definitivamente y empecé a vestirme para ir a desayunar. Empecé a notar ruidos extraños venir desde la calle, pero decidí no darlo gran importancia. Me giré para coger uno de los desodorantes de Ashton cuando escuché como unos cristales se rompían muy cerca de mí, asustado, miré al frente. En la terraza había una persona, con pinta de ladrón. Me miraba fijamente sin quitarme los ojos de encima. Empecé a ver como se acercaba rápidamente hacia mi, pero, no pude pedir ayuda. El tipo rompió el cristal y se abalanzó sobre mí, me tapó la boca con una toalla y me mandó callar. Angustiado, grité aunque, fue en vano.  Empezó a pegarme puñetazos en la cara, a lo que yo respondí con una patada en su pecho. El tipo se enfadó aun más y me dió el golpe aun más fuerte. Todo se volvió oscuro.

Mientras estaba poniendo rumbo hacia lo desconocido junto a este hombre noté como me metió en una especie de maletero. Mis oídos se silenciaron y empecé a perder el control tras oler una sustancia extraña

POV de Ashton:

Afuera había bastante estruendo, así que decidí ir a buscar a Luke, que probablemente estaba en la ducha. El grifo se escuchaba desde la habitación. Mientras andaba por el pasillo recibí una extraña llamada al teléfono. Apenas pude distinguir una palabra de lo que decía, pero empecé a alarmarme cuando escuché: "Luke es nuestro"

Llegué a la puerta del baño y la golpeé asustado:

- Luke, amor, ¿estás ahí? - dije

Nadie contestó

Abrí la puerta sin pensarlo dos veces y encontré una escena terrorífica. Había sangre por todos lados, cristales rotos y la huella de la mano de Luke en el poco cristal que quedaba de mampara.

Me derrumbé y de rodillas empecé a llorar descontroladamente, Luke no estaba

𝙃𝙤𝙢𝙚 - 𝙇𝙖𝙨𝙝𝙩𝙤𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora