CAPÍTULO 5

2.4K 218 688
                                    

DANDARA

El camino hacia la fiesta fue realmente corto por lo que únicamente llenamos el silencio cantando las canciones que Duncan me había dejado poner desde su celular.

Obviamente mi deber como DJ en la camioneta era poner canciones que fueran joyas para que pudiéramos cantar con todas nuestras fuerzas.

Cuando Dunkie estacionó la camioneta todos bajamos listos para ver lo que la noche promete.

–Amor, de una vez te aviso que te amo demasiado, pero que yo soy un hombre de muchos amores así que sí me ves rondeando por ahí no pienses que no te amo –advirtió Luke a la vez que me abraza y me daba un beso en la mejilla.

–Está bien Lukecito, pero espero que solo estes rondando con gente buena, no quiero que pongas tu culo cerca de gente maldita, ¿Estamos?

–¿Ven por qué me quiero casar con ella? Es el amor de mi vida –confiesa alejándose comenzando a adentrarse a la casa en la que se está haciendo la fiesta.

–No puedo creer que le siguieras la corriente, cuando estamos en fiestas se pone más baboso de lo normal y estoy seguro de que serás su objetivo para joder –me dice Duncan mientras ubica su mano en mi espalda y me incita a entrar a la casa.

–Pero ahí estarán Lan, Ash y tu para salvarme, Dunkie –aseguro, me adentro a la casa y comienzo a sentir el ambiente caluroso y lleno de música.

–Bonita, por sí no te habías dado cuenta Landon y Ashton ya se fueron a ligar y yo soy el único aquí contigo –suelta, haciéndome dar cuenta que tiene razón ya que puedo ver como en una esquina está Landon bailando con una chica y como Ashton se encuentra hablando con un chico en la barra.

–¡Vaya amigos me he conseguido! Al menos tú sí te quedaste conmigo –me volteo hacia él y apoyo mis manos en su abdomen marcado que es cubierto por una playera blanca.

–Manos quietas, bonita que si no me emociono –responde y me guía hacia la barra.

–¡Pues ahora solo hiciste que me dieran ganas de verte "emocionado"! –le confieso y lo veo servirse un vaso con agua.

–No creo que estés lista para eso bonita. Por cierto, ¿Qué te sirvo de tomar?

–Voy a decir algo muy tonto y cliché así que sorpréndeme –pido con una sonrisa.

–Está bien bonita, haré mi mayor esfuerzo –contesta y se pierde dentro de la cocina.

En ese momento empieza a sonar la canción –MI CANCIÓN– y yo no puedo quedarme sentada a esperar, por lo que me levanto y voy hacia el lugar en el que estaba todo el mundo bailando.

Comienzo a cantar junto a una chica que aparece de la nada y que parece estar igual de emocionada que yo por la canción que estaba sonando.

¡Ven aquí rápido! ¡Ven aquí rápido! ¡Es un llamado de emergencia, baby! –cantamos al unísono y comenzamos a mover las caderas al ritmo de la música.

¡Ven y sana mi dolor! –canta ella mientras yo bailo.

¡Tienes la cura de este amor! –canto mientras ella ahora comienza a bailar

¡Hago este llamado para que tú vuelvas! ¡Tú no ves que estoy sufriendo, es muy dura esta prueba! –cantamos y juntamos nuestras espaldas rozando nuestros traseros.

Hace mucho no disfrutaba tanto de cantar y bailar una canción –y déjenme decirles que es magnífico–.  No conocía de nada a esta chica, pero parecía mi alma gemela.

Continuamos bailando y cantando más canciones hasta que después de que bailaramos Gasolina y perrearamos hasta el piso, me sentí cansada y recordé que había dejado solo a Duncan.

INSUFICIENTEWhere stories live. Discover now