19. Dice Arisugawa

1.4K 101 20
                                    

Ahorrar.

Era algo que nunca en mi vida había hecho porque, si tenía dinero guardado, lo primero que hacía era ir a gastarlo con la intención de duplicarlo.

Esta vez, era diferente. Luche contra mi mismo para guardar el dinero suficiente y darle a mi querida ______ la mejor fiesta de cumpleaños de la historia.

Cumpliría 20 dentro de poco y, quería celebrarlo a lo grande. Ella me ha ayudado de tantas maneras que, aunque siento que no será lo suficientemente compensada con la fiesta de cumpleaños que estoy planeando, si la hará muy feliz.

Ramuda y Gentaro me ayudaron a hacer la compra de todo y decorar el departamento. Tan buena ha sido conmigo que, hasta me deja dormir aquí, es SU departamento. Todo va a salir de maravilla.


______ (a)_____.

Mi teléfono comenzó a sonar. Lo saqué de la bolsa de mi pantalón y contesté en cuanto vi que era Dice.

—¡Hola daditos!

—Ho-hola, ______.— reí.

A pesar de que somos novios, es muy usual que se ponga nervioso cuando él es quien me habla.

—¿Cómo estás? ¿Todo bien?

—Si. Si, de maravilla. Es sólo que... te... te extraño.

—Aiñññ. ¡Dice~! ¿Por qué eres tan lindo?

—¿Yo?— rió de manera nerviosa —Bueno, yo no diría eso pero...— se aclaró la garganta —¿Ya vienes camino a casa?

—Si. Es que, pasé a comprar antes un helado. Y tranquilo, llevo para los dos. Llego como en... ¿15 minutos? Algo así. Ya estoy cerca.

—Ah, perfecto. Entonces, aquí te espero.

—Ujum. ¿Algo más que quieras decirme? No me llamaste en toda la mañana.

—Preferiria felicitarte en casa, y así, darte un abrazo.

—Creí que lo olvidaste.

—¿Cómo podría?

—Pues, con mayor razón, correre hasta casa.

—Te espero entonces.— iba a colgar, pero habló. —¡Oi!

—¿Si?

—Te amo.

—Yo te amo más, daditos. Ahora nos vemos.

Esta ves si colgué y apresuré mi paso a casa. Dice es algo olvidadizo, por lo que había dado por hecho que mi cumpleaños se le olvidó pero, creo que lo subestimé.

Llegué al edificio y subí por el ascensor. Estaba muy ansiosa por ver lo que preparo. Así sólo sea un pastel, compartirlo con él será magnífico para mi.

Saqué mis llaves mientras caminaba por el pasillo. Abrí la puerta y... todo era un desastre.

El pastel estaba en el piso, esparcido por todos lados. Gentaro, Ramuda y el propio Dice estaban también cubiertos. Había vasos tirados y de estos salía alguna bebida. Eso sin contar, que una pequeña mesa estaba, literal, patas arriba.

—¿Qué sucedió?— pregunté extrañada. Quería reír por la escena frente a mi, pero si alguien se había lastimado quedaría mal así que me contuve.

—Yo... yo sólo... lo siento— alcanzó a decir Dice en un hilo de voz.

—Dice...— lo llamé pero fue inútil. Había salido corriendo del departamento.

HYPNOSIS MIC - ONE SHOTSTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang