Señora Manoban | Jenlisa

CAPÍTULO 12 (Especial De Año Nuevo Prt. 2)

- Shhh, no hagas ruido - susurraba riendo Jennie mientras su esposa tenía su boca besando y mordiendo en medio de los pechos de su esposa

Pero Jennie reía cada vez que Lisa se ahogaba y salía para tomar aire

- ¡Ajahx! - tosía cuando salió a tomar aire, Jennie la tenía contra su pecho y una mano en la cabeza para que no salga de ahí - ¡Sí no me dejas respirar, puedo morir! - susurró un tanto fuerte, Jennie rió

- ¡Shhh! Haz silencio que despertarás a Lía - regañó riendo, ambas voltearon a la derecha y ahí estaba la niña durmiendo plácidamente mientras ellas intentaban hacer algo sin despertarla

- Me rindo, esto es difícil - Lisa bajó del cuerpo de su esposa y se acostó en medio mirando el techo - Tenemos que hacer que Lía duerma en su habitación sin que se cruce a nuestra habitación - bufó

- Podemos irnos a un hotel, pero no quieres - Jennie alzó su cabeza apoyándola en su mano riendo pasando su dedo por el torso desnudo de la pelinegra - Tu cabello así te hace ver más sexy

- ¡Auch! ¡Jen! - se quejó cuando la coreana pellizcó su pezón

- Tu muerdes aún más fuerte, no te quejes - se defendió - Podemos dejar a Lía con mi hermana y...

- No Nini, no quiero tocarle algo a mis bebés, ya hablamos de eso - hizo un puchero tratándose ver enojada, pero a Jennie le dio ternura y dejó un beso rápido en aquel mohín

- No todo el sexo es penetración, amor

- Ya dije que no ¡A dormir! - demandó alzando la blusa del pijama de Jennie

- Lili...

- ¿Mh?

- ¿Cómo quieres que duerma si haces eso? - se quejó, Lisa dejó de chupar el pezón de su esposa

- Pero Nini... - su puchero creció - Tengo que aprovechar antes de que vengas mis bebés - berrincheó volviendo a meter el sensible botón de su esposa a su boca

- No me sorprendería si te llegaras a pelear con los bebés por mis tetas

- Ns usss eds pskslad

- ¿Qué? Sácala primero, Lili

- Qué no uses esas palabras vulgares delante de mis hijos - regañó, bajó su mano hasta el vientre plano de su esposa y dejó una caricia, Jennie amaba que haga eso

- No sé cómo es que tengo tres bebés dentro de mi, pero me gusta ¿Sabías que de niña decía que nunca me iba a casar? - preguntó - ¡Auch! ¡No muerdas fuerte!

- Yo creía que nadie me iba a querer - respondió apenas se sacó el pezón de su boca, dejó una lamida en el lugar que mordió - Pero llegaste tu, y te amo con toda mi vida

- Lo sé - rió - Si a la Jennie de hace varios meses le hubieran dicho que me iba a casar con una universitaria, tener una linda niña y tres bebés en camino, me hubiera puesto una bala en la cabeza yo misma - rió, pero a Lisa no le hizo gracia

- No da risa - tenía el ceño fruncido - No me agradan esas cosas, me hace recordar a las películas de sicariato

- Pues digamos que mi vida era así, pero llegaste tú - Jennie pasó sus dedos por la frente de Lisa para que borre su fruncimiento, luego besó su nariz - Sé que no te gustan esas cosas, pero de una vez te lo digo - Jennie la vió seriamente y Lisa le prestaba atención - Si alguien te llega a lastimar a ti o a algunos de mis hijos, no me lo pensaré dos veces y los bañaré con gasolina para después prenderle fuego dentro de un sauna - a Lisa le tembló el cuerpo

- Que cosas dices, Nini - Lisa se le acercó para darle un beso en los labios tratando de suavizar el ambiente - No eres tan psicópata - rió

- Lo que tu digas, mi amor - le siguió ignorando lo que acababa de decir - Lo que tu digas - y recibió gustosa el beso que le brindaba su linda esposa