Señora Manoban | Jenlisa

CAPÍTULO 4

Habían transcurrido un par de horas y Lisa no hacía acto de presencia en aquella solitaria habitación

El doctor ingresó a hablar con ella hace algunos minutos, sus bebés, de apenas dos semanas de gestación, estaban bien pero no debe hacer esfuerzo alguno y cuidarse mucho, luego le entregó su primera ecografía donde podía apreciar apenas tres pequeñas pero notables bolsitas en aquella foto ecografíca

Llevó una mano a su boca sonriente mientras observaba la foto con lágrimas en sus ojos

"Seré mamá, seré mamá y tengo tres pequeños mocosos formándose dentro de mí" limpiaba sus felices lágrimas, solo quería ser la mejor madre del mundo

"¿Dos semanas?" Pensó luego de unos minutos de guardar aquella foto bajo su almohadilla

"Ah, sí, en mi oficina después de la visita de Mino, Beomgyu y el resto de mis amigos en casa " recordó

" ¿Pero usamos protección no?..... Ah, si, mi calentura" suspiró rendida

También le dijo que había recibido un golpe no tan fuerte en la cabeza, eso no dejó ninguna herida, también descubrieron un tipo droga alucinógena en su cuerpo, gracias a las vías ya estaba limpia de cualquier daño a ella o hacía sus hijos

Jennie rió fuerte ante esta mención, el doctor la observaba raro ante tan repentina acción

"A sí que gracias al golpe y esa droga soñé que era terminator, bueno al menos esa alucinación estaba mejor que la puta realidad"

Luego de que el doctor saliera y la dejara descansar, observó por una pequeña ventana que ya estaba anocheciendo

"¿La habían dejado olvidada?" Pensó

"Si no vienen por mi en dos minutos, me largo" ahora ella era la enojada

Estaba por levantarse cuando un portazo se escuchó y una fuerte voz retumbó en el lugar

— ¡Oh por Dios! ¡Gracias al cielo que estás bien! — un gran abrazo llegó a ella

— ¡Te dije que no puedes correr, Jisoo! Hola Jen

— ¡Es mi hermana, Roseanne! — devolvía el grito mientras revisaba todas las partes de Jennie buscando alguna herida y esta solo sonreía, su preciosa hermana siempre la alegraba de alguna manera

— ¡Mami!

— ¡Lía no corras!

Detrás de su hermana y su cuñada, venían corriendo las dos razones de su felicidad, su sonrisa se agrandó, sus ojos viajaron a su pequeña mocosa quién quería subirse a su camilla pero un golpe en su hombro la hizo quejarse

— ¡Auch! ¿Porqué me golpeas? — sobaba su brazo mientras Jisoo la volvía a abrazar

— ¿Cómo qué porqué? ¡Saliste temprano y no llegaste en todo el día, luego Lisa llega por comida para ti y dice que estás en el hospital! ¡Te volveré a golpear por qué ya no me cuentas tus cosas! — gracias al embarazo, Jisoo estaba muy sensible así que se echó a llorar en el pecho de su hermana

— Mami, subeme — pidió Lía al lado contrario de Jisoo mientras alzaba sus manitas, Jennie sonrió

— Hola mi cielo — Jennie tenía una gran sonrisa mientras Lía ya estaba subida entre sus brazos y repartía varios besos por su mejilla, su enojo se esfumó

— ¡Jisoo, no puedes hacer esfuerzos! — reclamó Roseanne desde el sofá que compartía con Lisa quién llevaba una canasta de comida

Jisoo hizo caso omiso a los reclamos de su esposa así que subió a la camilla para acostarse al lado de su hermana y abrazarla escondiéndose en su pecho