Te necesito

29. CASI PILLADOS

- Kike – dijo Ana después de que Kike hubiera dejado a Anne totalmente dormida dentro de su casa – había pensado que podríamos irnos de vacaciones todos juntos, nosotros y los niños...

- Pero...

- Vamos a un camping, cogemos dos bungalós y así estamos juntos pero también tenemos nuestro espacio – dijo ilusionada – aunque si no quieres o tenéis otros planes no pasa nada.

- No, no. Me parece bien – dijo él sonriéndole.

Ana se acercó a él y le dio un tímido beso en los labios antes de entrar en casa.

- ¿Me ha besado? – se preguntó Kike entrando de nuevo al coche dónde estaba dormido Gerard.

...

- ¿Hugo? – dijo alguien al otro lado del teléfono.

- ¿Mamá? – dijo él.

- Cariño, que hemos llegado a casa y he visto que no estabas... ¿sigues en la graduación?

- ¿Eh? – dijo él aún medio dormido.

- ¿Que dónde estás?

- Ah, en casa de Eva.

- Pues Kike estará a punto de llegar, que nos acaba de dejar en casa a Annecita y a mí.

- ¡Mierda! – dijo él a la vez que colgaba y empezaba a mover a Eva para que despertara.

- Mmm...

- Eva cariño que... - la seguía moviendo pero ella ni se inmutaba - ¡Eva! – gritó.

- Hu... Hugo ¿Qué... qué pasa? – dijo ella desperezándose.

- Tu padre está a punto de llegar, me acaba de llamar mi madre que estaba de camino.

- ¡Mierda! – dijo ella repitiendo las palabras que segundos antes había dicho Hugo y saliendo corriendo a ponerse algo de ropa.

Cuando Kike llegó a casa y dejó a Gerard en su cuarto durmiendo, fue al cuarto de Eva y se encontró a Hugo sin camiseta.

- ¿Pero qué haces medio desnudo tumbado en la cama de mi hija? ¡Insensato!

- Eh... hace mucho calor Kike, estamos a finales de junio – dijo Hugo.

- Papá – dijo Eva entrando por la puerta con un pantalón muy corto, una camiseta de tirantes y una coleta alta en el pelo - ¿Qué pasa?

- ¿Que qué pasa? ¿Que tú qué haces tan ligera de ropa, con éste medio desnudo en la cama?

- Papá... somos novios y...

- ¿Qué? No me lo digas... ¿os habéis acostado en ésta cama? si ya decía yo que aquí olía a sexo... - dijo Kike mientras daba vueltas por la habitación.

- Sí que nos hemos acostado papá – dijo Eva, pero viendo la cara de susto de Kike rectificó – a dormir, simplemente a dormir, y como hace tanto calor pues nos hemos puesto cómodos.

- Ah, ya pensaba yo – dijo dirigiéndose a Hugo – que le habías quitado a mi niña su flor.

Hugo río por la forma tan cursi que tenia Kike de decirlo.

- ¿De qué te ríes? No se la habrás quitado de verdad, ¿no?

- ¡Qué no papá! No seas pesado anda, déjanos dormir – dijo Eva a la vez que empujaba a Kike hacia la puerta – buenas noches papá.

- Buenas noches Kike – dijo Hugo aún riéndose.

Kike fue a ver a Gerard otra vez y después a su cuarto a dormir pensando aún en el beso que Ana le había dado y en las vacaciones que iban a pasar todos juntos.

- Eva, me parto con tu padre... es buenísimo.

- Ya, ya, es muy carca ya lo ves... si nos llega a pillar hace un rato a mí me mete a un convento y a ti te mata. Pero seguro vaya – dijo Eva volviéndose a acostar a su lado abrazándolo.

- Buenas noches blanca flor – dijo Hugo dándole un beso en la cabeza.

- Buenas noches amor – dijo ella volviéndose hacia él para darle un beso en la boca.