10

4K 314 87
                                    

Pasaron, al menos, tres meses desde que se conocieron y anoche cumplieron dos de novios oficialmente. Ambos estaban felices, se sentían completos y totalmente amados.

Harry no dejó de ser ese alfa protector y amoroso, y Louis siguió amando a Harry y dándole el cariño que un buen omega puede dar.

Su familia estaba encantada, la de ambos. La mamá de Louis se puso feliz de conocer a su yerno, lo invitaron a cenar y le festejaron la mordida. Por otro lado, los padres de Harry trataron al omega como su hijo, prometiéndole apoyarlo en todo.

Todo estaba bien, Niall estaba saliendo con Amelia, Zayn había conocido a una omega dulce y adorable llamada Gigi, y Liam empezó a estudiar una carrera junto a una beta llamada Maya que le llamaba la atención.

Ahora mismo, Louis estaba solo en su casa. Niall se había ido con su novia y Harry estaba trabajando. Se dispuso a mirar una película para desaburrirse.

El problema fue cuando, al acostarse en su cama, sintió el potente olor de su alfa, el cual estaba impregnado porque el rizado pasaba mucho tiempo ahí. Y, no era para sorpresa que una ola de calor lo invada.

Había iniciado su celo.

Respiró hondo por el dolor que éste le causaba, y la película pasó a segundo plano cuando el lubricante empezó a humedecer su zona baja. Chilló y se llevó una mano al pene por debajo de la ropa, apretándolo un poco.

Sabía que Harry sentía su dolor por el lazo, pero no sabía si podría venir a ayudarlo, y no iba a obligarlo. Había entrado a trabajar hacía una hora, no podía forzarlo a correr con él.

Tragó duro y comenzó a bombear.

Tiró la cabeza para atrás mientras gemía, los movimientos de su mano alrededor de su pija eran constantes. Cerró los ojos con fuerza, imaginando a Harry sobre él y penetrandolo con fuerza, tocando repetidas veces su punto dulce, haciendolo temblar y transpirar. Podía escuchar sus gemidos graves y roncos en su oído, y sentía el tacto de sus dedos en su cintura.

Un cosquilleo en su vientre bajo se hizo presente y bombeo más fuerte, sin dejar de gemir.

- Harry, H-Harry - jadeaba, con la boca entreabierta y salivando - ¡Oh, sí, Harry!

Un par de movimientos más fueron necesarios para que su duro pene se deshaga en una corrida dulce, manchando su abdomen y su mano. Respiró repetidas veces, sintiéndose más aliviado. Pero sabía que no bastaría, en cualquier minuto su celo despertaría de nuevo al no ser tratado correctamente.

Necesitaba a Harry.

[...]

En otro lado de la ciudad, el rizado estaba sirviendo un café doble con medialunas a un señor mayor, supo que era beta por su olor. Le sonrió amablemente y se retiró al mostrador.

Apoyó los codos y sonrió recordando los besos de Louis antes de venir. Un nudo se formó en su estómago y sintió un tirón en el cuello.

- Lou - susurró y se llevó la mano al pecho, su corazón iba rápido. Algo le pasaba a su omega.

Corrió a la parte de atrás de la cafetería, buscando a su jefe el cual estaba firmando papeles.

- Señor Higgins - dijo, el hombre levantó la mirada. - Necesito irme.

- Tu turno aún no termina, Harry - frunció el ceño divertido. Era un alfa muy simpático.

- Lo sé y perdón pero algo le pasa a mi omega - jadeó - lo sentí por el lazo.

- No sabía que estabas enlazado, felicidades - le sonrió y miró la hora - bien, pero quiero que compenses las horas la semana que viene.

- ¡Sí, claro que sí! - chilló - gracias señor.

Coffee Shop [l.s omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora