/Flashback/
En una ocasión la manada de los trillizos fue atacada, los invasores eran muchos tanto así que muchos habitantes perdían la vida tratando de proteger sus tierras, los fieles guerreros de la manada estaban heridos pero aún así trataban de alejar a los invasores.
Mientras los trillizos discutían sobre la situación actual de su manada, Sur y Centro querían participar en la lucha pero Norte no estaba de acuerdo, no quería que sus hermanos menores fueran lastimados por el enemigo.
M.Centro: No puedes ir tu solo!!! (sus ojos se ponen llorosos) Que será de nosotros y nuestro Alfa si tú mueres!!!!?? (es abrazado por Sur quien busca tranquilizar a su hermano)
M.Norte: Recuerda que no soy cualquier Omega (sonríe) fuimos bendecidos por los dioses desde antes de nacer (acaricia el rostro de Centro) estaré bien, deja de llorar (limpia suavemente sus lágrimas)
Urss observaba atento la escena, comprendía la situación de los trillizos, deseaba poder frenar pronto aquella guerra y no ver el sufrimiento en sus rostros, una y mil maldiciones pasaban por su mente, esto era injusto la manada de los trillizos era conocida por ser pacífica y neutral en cuanto a problemas de las demás manadas sin embargo eso no quiere decir que no brindaran su apoyo cuando los demás lo necesitaban.
La batalla fue intensa, en un descuido México Norte estuvo por ser atravesado por el filo de una espada sin embargo.......................
Frente a el estaba Urss con una espada atravesando su estómago, grandes cantidades de sangre salían de su cuerpo, su rostro sostenía una débil sonrisa, el brillo de sus ojos se apagaba a cada segundo, de su boca escurría un poco de sangre que se deslizó hasta manchar su ropa, sus ojos se cerraron para no volver a ser abiertos.
La respiración de Norte empezó a ser irregular, la desesperación recorría cada parte de su cuerpo, en sus brazos sostenía el cuerpo de aquel hombre que considero como su padre, sus manos estaban manchadas por la sangre del Alfa, con cuidado comenzó a mover al contrario tratando de despertarlo.
M.Norte: Urss? (lo mueve con insistencia) por favor des.... despierta (empieza a temblar mientras sus ojos eran nublados por lágrimas)
Todo ruido se detuvo a su alrededor, alzó su mirada observando como su gente moría a manos de aquellos invasores, el cielo empezó a oscurecer asustando a los habitantes que voltearon a ver a su líder, la mirada de Norte no expresaba ninguna emoción, el primer trueno retumbó en el cielo provocando que los intrusos dejasen de atacar.
Con cuidado Norte recostó el cuerpo de urss en el suelo, empezó a levantarse lentamente causando intriga a los intrusos que lo miraban confundidos, al levantar la mirada apreciaron unos ojos rojos como la sangre, los rasgos salvajes de Norte empezaron a aparecer asustando a la manada enemiga y llenando de orgullo a los habitantes de su manada.
Por fin su líder había despertado de su largo sueño impuesto por sus dioses, la cosa se puso fea pues en un abrir y cerrar de ojos Norte atravesó el pecho del líder invasor sosteniendo en sus manos el corazón del contrario, su cuerpo estaba manchado de sangre, su mirada dió escalofríos a la manada enemiga pues los miraba con superioridad, el cascabel de su cola sonaba advirtiendo del problema en el que se acabaron de meter.
Gritos desgarradores se escuchan frente al campo de batalla, la bestia se encontraba molesta pues asesinaron a alguien muy preciado para el, el olor a sangre estaba en todas partes, unos pocos rogaban por su vida al líder mexicano que comenzó a reír provocando más miedo y temor a dichos individuos.
