𝙼𝙴𝙼𝙾𝚁𝙸𝙴𝚂 _ [ 𝚈𝙸𝚉𝙷𝙰𝙽 ]

34. CUANDIXIA

- Xiao Zhan, Xuan Lu, que bueno vinieron. -hablo la señora Jing Tong, con un pañuelo de seda en las manos.

- ¿A-Cheng aún no a llamado? -preguntó Zhan.

Wang Jing Tong pasó el pañuelo por sus ojos rojizos para secar las lágrimas, generalmente la severa Señora Jing no mostraba sus expresiones, haciendo que la vieran como alguien malhumorada. Pero esta vez no pudo reprimir sus emociones, Zhuo Cheng, su único hijo estaba desaparecido por seis días y no daba indicios de que quisiera comunicarse con alguien. Y aunque ya se había contratado personal para que puedan buscarlo en completa discreción, aún no daban con el único hijo de la familia Wang.

- No. -respondió tratando de calmar sus sollozos.

Xuan Lu llevo a la señora Jing Tong a que pudiera tomar un tranquilizante y para que pudiera descansar. Mientras tanto Xiao Zhan tomó su movil y marcó un par de veces más a Zhuo Cheng, pero el teléfono solo lo mandaba al buzón de mensajes, hasta que...

- Hola!

Xiao Zhan escuchó la voz de una mujer mayor atravez de la linea, bajo el móvil para confirmar que no se estaba confundiendo de número, y en efecto este era el correcto. Entonces, ¿quién era la mujer que tenía el celular de Zhuo Cheng y donde estaba?

- ¿Es usted pariente del dueño de este teléfono? -se escuchó la débil voz de una anciana.

- Si, ¿Dónde está?

La anciana comenzó a decirle en donde se encontraba, y como llegó el teléfono de Zhuo Cheng a sus manos. Al terminar de oír lo que la anciana dijo, el celular resbaló de sus manos al tratar de cortar la llamada, cayendo sobre la alfombra.

El mayordomo Coleman que pasaba por el lugar llevando una bandeja con una pequeña tetera y tres pequeñas tazas, se detuvo al ver la expresión que mostraba el rostro de Zhan. Dejo la bandeja sobre una mesita de los pasillos y se acercó a la persona que intentaba agacharse para recoger el objeto.

- Joven Zhan, ¿se encuentra bien? -levantó el móvil y se lo devolvió.

Xiao Zhan asintio, tomo el celular de su mano y hablo:

- Tengo que irme, llamaré después.

Al terminar de hablar Xiao Zhan corrio hacia la salida, hizo parar un taxi y desapareció de la casa.

Tan pronto como llegó a su casa, pagó el taxi, y entró a su hogar. Los señores Xiao sabían de lo que le había pasado a Zhuo Cheng, y comprendieron cuando su único hijo dijo que iría a buscar a su amigo. Puso un poco de ropa en su mochila, dinero para pagar el pasaje y salio de casa, despidiéndose de sus padres.

Cruzo la pista para tomar un bus que lo llevaría a la estación del tren. Pero lo que aún no entendía era, ¿Cómo y porque, Zhuo Cheng había llegado hasta Cuandixia*.

La provincia de Cuandixia estaba a tres horas en auto, además de que Zhuo Cheng no tenía familiares o alguien conocido allí.

La mente de Zhan formulaba pregunta tras pregunta, debido al supuesto paradero de su amigo.

Mientras esperaba la llegada del bus, su teléfono comenzó a vibrar en el bolsillo de su abrigo. Saco el teléfono y vio el nombre de Yibo en la pantalla.

⊱⋅ ─────📱───── ⋅⊰

- Bueno..

- Zhan Zhan, salgamos hoy, paso por ti en una hora.

- Yibo, hoy no puedo, volveré mañana.

- ¿Por qué?

Xiao Zhan le dio una breve explicación de lo que había pasado hace unos minutos con respecto al paradero de Zhuo Cheng.