𝐸𝑙 𝑅𝑒𝑔𝑟𝑒𝑠𝑜 𝐷𝑒𝑙 𝐻𝑖𝑗𝑜 𝐷𝑒 𝐻𝑎𝑑𝑒𝑠©

Capitulo Ocho

—Nico yo-

—Esta bien, Percy...no tienes que disculparte—

Percy frunció el ceño, ya alejados de las voces del comedor y encontrándose cerca de la cabaña de Nico.

—No,No  Nico, yo debo de disculparme — bajo la cabeza — Te di la espalda y te juzgue sin pruebas, yo debí de defenderte ...lo lamento mucho, Nico.

Nico se quedo en silencio, mirando a Percy, luego suspiro.

—Percy, yo te perdono, ¿Esta bien? Todo eso quedó en el pasado—

—Pero yo-

—En el pasado, Percy, no tengo rencor contra ti ni nada, lo superé—.

—¿Entonces volvemos a hacer amigos?— Percy levantó la cabeza y sonrió.

—No, no confío en ti, Percy— Nico ladeó la cabeza — no lo seremos en seguida, pero tal vez en el futuro—.

Percy frunció el ceño, pero asintio y le sonrió — es un gusto que estés aquí otra vez.

Leo propuso ofrecer la cabaña de Hera como alojamiento de los extranjeros, todos desecharon la idea al momento.
Era apenas las siete de la noche , y necesitaban un lugar donde pasarla.

—Dormiran en mi cabaña — sentenció Nico— De todos modos no es la primera vez que nos vemos obligados a dormir en   un lugar extraño, ¿Verdad chicos?.

Los seis  asintieron deacuerdo y empezaron a hablar entre sí para ver quién se quedaba en la mejor cama.

—Eh..oye —

Nico volteó a ver a Annabeth, quién desvió la mirada al suelo cuando Nico la miro fijamente.
Todos se quedaron en silencio, impacientes y expectantes para ver qué sucedía a continuación.

—Puedes...eh —Percy iba a decir algo , pensando que Annabeth se iba a disculpar , pero no era lo que la rubia quería decir — ¿Puedes decirles a tus "hombres" que quiten el carro del techo de la cabaña de Athenea?—

Nico no contesto , se alzó de hombros y se dio la vuelta sin contestarle, sin embargo levantó la mano y señaló a Leandro y luego a la cabaña de Athenea.

El muchachito entendió las instrucciones y salió corriendo hacia haya.

—Moonlights — Dijo Nico — Síganme.

Y así se retiraron a la cabaña de Hades y cuando todos los extranjeros se fueron, Percy volteó a ver a Annabeth con un ceño fruncido.

—¿Porque no te disculpaste? Era el momento y podías hacerlo ya — regañó el hijo de Poseidón.

—Ya les dije, lo haré cuando él decida hablarme —.

—Que terca eres , Hija de Athenea — escupió Reyna — Pero nadie te va a obligar, si es lo que piensas.

Jason , Reyna , Hazel y Frank fueron a la cabaña de Zeus, para dormir está vez ahí, idea de Hazel. Porque la morocha pensaba que si volvían al campamento Romano, tal vez Nico se iría.

—¡Debimos de irnos ayer en la noche! Nos rastrearon y ahora Nemorensis está aquí —  corrieron los siete de la anterior profecía y los seis extranjeros, los de Hermes habían dado la noticia de que había llegado un grupo de hombres extraños  y su líder, quien buscaba a Nico, presentándose con el nombre de Nemorensis.

—Hablare con el— dijo Nico mirando a Ramona — Si hacen algo extraño no duden en atacar , protejan a los semidioses y — Miro a los semi divinos reunidos junto a él y los señaló — no se acerquen.

—¡Sal Nico Di Angelo! Mi sabuesos ya te olieron a kilometros— Grito una voz ronca con deje de burla y superioridad.

Mientras Nico caminaba hacia el borde de la barrera, una enorme vara de hierro se deslizaba de su brazo, dio varias vueltas con ella y de la nada se convirtió en una guadaña negra del tamaño de Percy.

El azabache corrió ignorando los gritos de Reyna, y traspaso la barrera, mandando a volar a uno de los secuaces de Nemorensis de un rodillazo.

—¡Es el!— grito uno de los hombres de Nemorensis— ¡Es Nico! Si estaba aquí!—

—Callate Bartra, o te rompo los huesos— gruñó Nico , haciendo que el chico llamado Bartra se callara y se escondiera detrás de un enorme gordo de aspecto amenazante.

—¡Que gusto es verte!— saludo sonriente, Nemorensis, escaneando a Nico con sus ojos rojos— Hace , ¿Que? ¿Un año que no nos vemos? No me has estrañado?—

—Si no te vas de aquí, te matare...— Nico se acercó, sin una pizca de miedo, hacia el hombre de cabellos largos, ojos rasgados rojos y tan blanco como el papel — Y no quiero ensuciar mi guadaña, Nemo.—

El hombre de nombre Nemorensis suspiro con decepción falsa y se acerco a Nico, quién no hizo ningún movimiento, pero los semidioses estaban nerviosos detrás suyo , oyendo y viendo la situación sin tener el valor para acercarse, ya que el hombre alto se veía endemoniadamente aterrador, o bueno, a sus ojos— ¿Porque me tratas así?¿Acaso ya no me amas?—

Los semidioses soltaron un jadeo de sorpresa y fruncieron el ceño en confusión, mucho más Will que se veía herido entre la multitud. Aunque los Moonlights no se veían afectados, Percy noto que parecían esperar esa pregunta.

—No, no creo haberte amado nunca— Respondió Nico con dureza, no sin que antes una pizca de duda volará por sus ojos , siendo notada rápidamente por el de ojos rojos, quién sonrió y acerco su rostro hacia Nico.

—Yo creo que sí, eres tan obvio mi querido Nico — sonrió lamiéndose el labio , sin quitar la mirada de el — ¿Acaso tú-

—Nemorensis De Traz, si no te vas de este lugar ahora — su voz bajo una octava y su mirada se volvió más amenazante, más oscura, más violenta— Te haré lo mismo que le hice a tu padre.

El hombre jadeo y una mirada nerviosa y de miedo, con un poco de dolor ,se plantó en su rostro,  ajelandose del Moonlight y frunciendo el ceño.

—¿Acaso está pocilga es tuya? No veo tu nombre en ella ni nada de eso — Hablo mirándolo con irritación y ojos dolidos— Fácilmente puedo pedirle a mis hombres que entren en ese estúpido lugar y destruyan-

—Ese campamento está bajo mi protección...— sentenció levantando su guadaña y señalándolo— Si me entero que tocaste algo, a alguien, que siquiera pones un pie a ahí, el trato con tu gente se romperá y te arrancaré los ojos.—

—Hace un año no decías eso— murmuró bajando la cabeza, no asustado, si no pareciendo dolido.

—¡Nemorensis! — regañó.

—Me iré , pero te estaré vigilando Hijo de Tatiana, algo grande se aproxima lentamente y tu no serás lo suficientemente fuerte como para evitarlo, no está vez.—.
El de cabellos largos le dio una última mirada a Nico antes de girar y desaparecer entre los árboles.
Entre toda la conversación de Nico, Percy no pudo evitar quedar aún más extrañado por algo que ese tal "Nemorensis" había dicho.

"Hijo De Tatiana".