#1

8.3K 640 729
                                    

Día 1: Doméstico +  "Mi corazón no está latiendo rápido, lo juro."

** 

Era un domingo en la mañana, probablemente apenas pasando las diez de la mañana cuando de repente Sakusa comenzó a sentir que estaba despertado gracias a unas pequeñas sensaciones que estaban siendo repartidas a lo largo de su rostro.

Lentamente iba comenzando a tomar consciencia de estar despierto pero se mantuvo con los ojos cerrados, disfrutando un poco más de aquellos suaves labios que dejaban suaves besos por toda su cara y que le hacía sentir con el corazón caliente a pesar de los fríos climas que habían estado pasando los últimos días. Además hizo todo lo posible para evitar sonreír, todavía estaba un poco flojo como para hacer notorio que estaba despierto.

Claro que no le duró mucho.

— Omi, ya sé que estás despierto, dame besitos tú también.

La baja voz de Atsumu llegó hasta sus oídos, haciendo que sonriera de forma interna.

No le gustaba admitirlo en voz alta, pero amaba cuando le despertaba así. 

Lentamente empezó a estirarse en la cama, haciendo que Atsumu se le apegara todavía más, sabía perfectamente que si se descuidaba un poco lo soltaría para fingir que seguía durmiendo, tal como solían molestarse mutuamente.

— No hay besos hasta que te laves los dientes.

— ¡Ya me los lavé antes de despertarte!

— Pero yo aún no.

— Entonces ve rápido para que pueda besarte.

— Acabo de despertar, un domingo, ¿y ya quieres hacerme salir de la cama?

Ambos vivían juntos desde hace un par de años, siendo bastante provechoso ya que trabajan juntos y podían llegar a los entrenamientos a la misma vez sin necesidad de atrasarse debido a las rutinas que se habían estado creando por tanto tiempo. La relación que tenían era bastante fuerte a pesar de que nadie les había tenido esperanza alguna cuando empezaron a salir en la preparatoria, pero si eran sinceros ni ellos mismos habían creído durar tanto tiempo.

Se conocieron en el campamento juvenil, teniendo una conexión instantánea en la cancha por el mismo deseo de victoria que tenían. Se entendían, se admiraban y de a poco comenzaron a complementarse, no importaba que por unos años no estuvieran del mismo lado de la cancha. Era bastante normal que hablaran más a través de los pases que por sus palabras, durante los primeros días no dijeron mucho más que sus nombres y alguna que otra sugerencia para mejorar el juego, 

A diferencia de lo que todos sus amigos suponía, fue Kiyoomi el primero en enamorarse y además en declararse.

No recordaba cuándo fue que cayó por los encantos del Miya, pero sí supo que en cierto momento las bromas de "ya caíste por mí, ¿verdad?" que le decía tenían la respuesta "sí".

Como era la primera vez que se enamorada de tal magnitud, no tardó mucho en sentir la impulsividad invadiéndole y haciendo que un día después de un gran remate le aceptara el saludo del festejo diciendo un corto.

Me gustas, Miya.

El chico no había entendido realmente, le dio una sonrisa confusa como las que solía poner cuando le explicaba cómo cocinar algún nuevo plato y asintió levemente.

¿Como armador?

No, me gustas.

Ah... ¿en qué forma te gusto?

Us || SakuAtsu Fluff WeekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora