El amor, la cosa por la que han existido guerras, mitos, leyendas... por lo que la gente sufre y anhela, pero cuando chocas miradas con esa persona sientes esa profunda conexión que revoluciona todo lo que conocías incluso si al final todo es un de...
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Mi tiempo procesando que lo logro no fue mucho pues Edward salió buscando algo, rápidamente me encontró y empezó a caminar hacia mi auto. Huir no serviría de nada, aparte necesito información sobre él.
-¿Por qué huiste de esa manera?- pregunta tan solo llega
-En primera no hui, necesitaba venir por algo a mi carro y en segunda yo no te debo explicaciones- aunque no puede leerme la mente sentí que eso no lo convenció
-¿Por qué preguntas sobre Carlisle?- ataco- ¿Por qué tienes los ojos ámbar y no rojos?
-Prometo resolver tus dudas- conteste- Pero antes, ¿Me puedes llevar con él?
Su rostro se suavizo al escuchar la súplica en mi voz, supe sin entrar a su mente que estaba analizando algo.
-¡Edward!- la chica de cabello corto vino rápidamente a nuestro encuentro
-Mucho gusto, soy Alice Cullen- se presenta con una sonrisa, su voz es melodiosa
-Vanessa Bennett- respondo de la misma forma
-Nunca había visto a una vampira igual que nosotros desde el clan de Denali- su sorpresa es fácilmente de detectar
Siento curiosidad y me meto en su cabeza, de alguna manera en el momento en que disipe el escudo al llegar me vio hacer lo mismo que ahorita, su don es ver el futuro.
-¿Vienes?- Alice me pregunta
Me toma de la mano y me lleva con ella dejando atrás a Edward que rápidamente iguala la caminata y se pone a mi lado, yo quedando en medio, a lo lejos veo los rostros de los demás, no están sorprendidos por mi presencia así que llego a la conclusión que Alice les informo y Edward se los confirmo.
Al llegar me sonríen y hago lo mismo, no me había dado cuenta del festín de pensamientos que cruzan por los alumnos, al parecer era la primera persona que los Cullen dirigían palabras, eso me hizo sentir ridículamente bien y levante más la cabeza, no era tonta, me hablan porque soy vampira, pero eso no lo saben los curiosos.
-Chicos, ella es Vanessa Bennett- Alice me presenta
-Hola Vanessa, soy Emmett- sonríe el grandulón, de cerca da más miedo
-Hola, soy Rosalie- habla la rubia hermosa
-Hola Vanessa, soy Jasper- el ultimo parece perturbado, mi curiosidad me puede y me meto, es así porque lleva muy poco con ellos y se siente alterado por la sangre humana aun.
-Los Cullen- digo, se me quedan viendo- Son muy populares, creo que escuche a más de 10 chicas cotillear sobre ustedes- sonríen- Aparte Edward se presentó y por lo que he escuchado aparentan ser hermanos adoptivos del doctor Carlisle Cullen y Esme Cullen.
-Tiene mis mismos dones pero de alguna manera más capaces- Edward informa, todos asienten
-Quiero ir con Carlisle- afirmo- ¿Me llevan de buena gana o los tengo que forzar?- nunca hablo tan así pero necesito ver a Carlisle
-Tranquila fiera- Emmett dice
-Claro que te llevaremos- Alice afirma
-Te me haces conocida- Rosalie me analiza de abajo para arriba- Siento que te he visto en otro lado
-Tal vez sea porque ambas somos guapísimas- le guiño un ojo a Rosalie y esta medio sonríe
-Somos hermosas- afirma y ahora yo sonrió
-Bien- Edward corta el momento- ¿Nos sigues?- me voltea a ver yo asiento
-Claro- todos nos dispersamos y yo camino a mi carro, lo enciendo rápidamente y salimos, el flamante carro de Rosalie para primero y Edward pasa después, al final me encuentro yo.
Llegamos a una casa lejana como la mía, la casa es moderna, tiene un precioso patio lleno de nieve, la casa es de cuatro pisos, la entrada es una puerta de roble preciosa, ahí escaleras para subir a ella. Salgo de mi carro y por primera vez siento expectación ante lo que va a pasar.
Una mujer abre la puerta, por los recuerdos de Edward sé que es Esme, me sonríe con una ternura que no sabía que alguien como nosotros podría tener, la imagen de ella en la mente de Edward se queda corta al verla en persona.
Subimos las escaleras y me adentro hacia la casa, si de afuera es hermosa de adentro es espectacular, resulta acogedora, el estilo es moderno aunque de alguna manera sigue teniendo un aura de pasado. Un sillón es lo primero que veo en la esquina del cuarto, pinturas y macetas adornan un poco el espacio, mi atención viaja a un piano hermoso.
-Mucho gusto querida- mi concentración viaja hacia la portadora de esa voz dulce- Soy Esme- me sonríe con calidez
-Gracias, gusto conocerla, me llamo Vanessa Bennett- sonrió de la misma manera y veo a los 5 esperando alrededor de nosotras
-¿Vanessa?- esa voz, volteo rápidamente hacia el lugar proveniente de esa voz, parado enfrente de las escaleras esta Carlisle
-¡Carlisle!- corro hacia su encuentro, el rápidamente me envuelve en sus brazos de piedra, aunque esto no lo siento pues los míos son iguales
Siento la mirada de todos los demás restantes de la sala
Nos separamos y sonrió al ver que sigue igual, ese pensamiento me resulta divertido pues él nunca va a cambiar
-Volviste- me sonríe
-Claro- le respondo
Ambos nos damos cuenta que no estamos solos y me aparto de el para ponerme a su lado
-Chicos, ella es Vanessa, la primera persona que convertí
