CAPITULO VENTIDOS

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Pasaron dos días y Lyra había recibido una simple respuesta de Lucius Malfoy

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Pasaron dos días y Lyra había recibido una simple respuesta de Lucius Malfoy. Ahora caminaba hacia la entrada del Caldero Chorreante, y caminó hacia la esquina del lugar, sentándose elegantemente. Miró su reloj para ver que faltaban un minuto para las 10 y, cuando el reloj marca, se escuchó el sonido de la campana.

Miró hacia arriba para ver a un grupo de amigos entrando en el lugar, encabezados por nada menos que Regulus Black. Examinaron la habitación en busca de la presencia de su amiga, y cuando los ojos de Regulus se posaron en ella, una pequeña sonrisa apareció en sus labios.

Los saludó suavemente, no queriendo atraer más atención, y el grupo se dirigió hacia ella. Luego se puso de pie y les hizo un gesto para que la siguieran, caminó hacia el otro lado de la habitación y hacia un pequeño pasaje era visible. Estaba completamente oscuro y completamente vacío. Y cuando ella entró, el grupo de Slytherins le arqueó una ceja.

Ignorando sus miradas interrogantes, se detuvo frente a una pared de ladrillos y su mano hizo contacto con el ladrillo. Se arrastró sobre él durante unos segundos, antes de detenerse y empujar el ladrillo, lo que hizo que la pared temblara y se partiera en dos, abriendo un nuevo pasaje para ellos. Se paró a un lado, haciendo un gesto para que todos entraran.

Entraron en la habitación, solo para ver una mesa grande con muchas sillas, un candelabro de lujo colgando encima y una chimenea detrás del borde de la mesa. Cuando entró la última persona, que era Lyra, cerró la puerta con fuerza y ​​la pared tembló una vez más. Inmediatamente sacó su varita, y por un segundo pensaron que iba a matarlos a todos.

"Cálmese." Lyra puso los ojos en blanco,

"Silencio". Ella emitió.

"Muy bien, hablemos de negocios, ¿de acuerdo?" Preguntó, caminando hacia el borde de la mesa y sentándose allí.

"¿Trajiste el libro?" Se volvió hacia la rubia.

"Si." Dijo, sacando un libro de su túnica y entregándoselo a la chica.

"Sin embargo, no tengo idea de por qué mi padre colocó varios amuletos en él. Está completamente vacío. Y afortunadamente, logré romper la magia". Él sonrió con suficiencia.

"Muy bien. Lo que estoy a punto de decirte es completamente confidencial, y solo Remus sabe sobre esto. He colocado un amuleto en esta habitación. No podrás decir una palabra sobre esto una vez que estemos fuera de esta habitación, a menos que yo se lo permita. ¿Me oyes?' Dijo ella severamente.

Un coro de sí se ganó un asentimiento satisfecho de su parte.

"Muy bien entonces. Antes de comenzar, ¿alguno de ustedes ha dominado la Oclumancia?" Ella cuestionó

Los seis slytherin asintieron, todos lo habían dominado hace unos meses, cuando Lyra los llevó a todos al límite. Sin embargo, no era culpa suya, porque todos habían conocido al Señor Oscuro, y le encanta entrometerse en las mentes de los demás.

𝐓𝐇𝐄 𝐆𝐈𝐅𝐓𝐄𝐃Where stories live. Discover now