09

2.3K 328 40
                                    

sobre el nombre Luke y como no todas las cosas que habían cambiado a mi vida eran buenas


Luke, Luke era en verdad un lindo nombre. El sólo nombrarlo en mi mente me producía una extraña sensación que bajara por todo mi cuerpo. 

Luke, el nombre Luke me hacía imaginar una montaña y oler las paginas de un libro nuevo, me llevaba a la rama del árbol mas alto y también me recordaba al aroma del café. Me hacia recordar a muchas cosas buenas, todos los pequeños placeres de la vida desde mi punto de vista, porque Luke, sin duda, era una mezcla de todos ellos. 

Me encontraba sentado, detrás del mostrador como de costumbre. Pero hoy, había pasado de nuevo, él no había venido. Los días sin él eran vacíos, eran silenciosos y melancólicos. Él parecía iluminar la biblioteca con su presencia, pero cuando no estaba, todo era oscuro y tranquilo. Como si no solo yo, sino todos notaran su ausencia. 

Mientras algunas personas leían, yo me volvía a cuestionar el porque, pero jamás encontraba una respuesta, no es como si yo tuviera la respuesta, así que decidí que se lo preguntaría. Segundos después me di cuenta de la comodidad que había tenido para decirme a mi mismo que le preguntaría, y no supe que pensar de aquello. Porque ahora, yo no sabia con certeza que pasaría, si él seguiría leyendo y yo observando o habría algo mas,  y si él deseaba que hubiera algo más. Sin embargo, tendría que hacer algo por ello, así como todo lo demás. 

Pero esa preocupación seguía allí, tal vez el chico tenia problemas y por eso no venia, en ese caso no sabia si sería o no correcto preguntar, tampoco quería ponerlo en una situación incomoda. Tal vez solo debía esperar hasta el día siguiente y ver que pasaba. Otra cosa que a veces me preocupaba eran aquellas palabras que una vez me había dicho. Y la idea de que él no estuviera conforme con sí mismo, o que se desvalorizara, me perturbaba todos los días. 

Luke. Su nombre saliendo de sus labios aun seguía repitiéndose en mi cabeza como flechas al corazón. Jamás había pensado en ese nombre para cuando me imaginaba el suyo, jamas había pensado mucho en ese nombre en si, y ahora paresia ser lo único que llenaba mi mente. 

En ese momento lo que quería hacer era llegar a mi casa, lugar que ya no era tan deseado desde que había conocido a aquel chico, muchos cosas habían cambiado por él. Tampoco miraba televisión, lo había remplazado por cerrar los ojos y reproducir en mi cabeza cientos de momentos con él que por supuesto, nunca pasaron y tal vez no pasarían. No había escrito en mucho tiempo, demasiado distraído como para ponerme a pensar en algo que no tenga que ver con él.

Con sinceridad, me daba cuenta de que estaba mal dejar de hacer cosas o cambiar mi vida sólo por él, me sentía patético, pero él me hacia patético. Él me hacia muchas cosas, y pocas de ellas tenían una explicación lógica.




limerencia • mukeWhere stories live. Discover now