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Et ce monsieur défendra cette puce coûte que coûte
∙𝖩𝗎𝗇𝗀𝗄𝗈𝗈𝗄∙

- Hola Tae, precioso.

- Hola MinMin.

Nos encontrábamos en la cafetería del instituto. Era un nuevo día de mi plan de conquista y lo desperdiciaría ni por un segundo. Mientras mi Tae y yo comíamos nuestra merienda tranquila y elegantemente, llega "MinMin" ¿Qué quién demonios es MinMin? Min-ho, Choi Min-ho.

- Hola Jongkuk.

- Es Jun-

- No me importa. — a veces pienso que Lihan y Min-ho son tal para cuál. — ¿cómo estás, lindo?

- Bueno, yo me encuentro muy bien. — respondo.

Min-ho sonríe fingidamente. Veo de reojo a Tae mientras sostengo la mirada en Choi, noto que mi rubio está con una ceja alzada, esperando como de costumbre la discusión entre nosotros.

- No me refería a ti Jon. — dice aparentando tranquilidad, tratando de ocultar el hecho de que lo estoy sacando de quicio. — deberías dejar de tragar y ahorrar dinero para comprarte un cerebro.

- Sabes que Min-ho, cada vez que estás cerca, entiendo más la frase "eres lo que comes".

- ¿Ah si? — pregunta curioso. Creo que se imagina a que lleva esto.

- Si; verás, cada día, mientras la tableta de chocolate en mi abdomen se forma mejor, veo más el parecido de tu cara a un pito.

Tae aguanta la risa que quiere dejar escapar. Veo que disimula mordiéndose el labio y tapándose con una mano, mientras Min-ho solo me ve con ojos de furia y su sonrisa confianzuda tiembla.

- Al menos, trago más penes que tú.

- ¿Disculpa? — dice Tae. Parece que alguien metió la pata.

- Ah, no yo...

- Bueno, es que a mi me gusta solo un pene. — yo también metí la pata.

- ¿Podemos dejar de hablar de penes? — Habla mi sol.

- Lo siento. — decimos al unísono MinMin y yo.

- ...Tae, lindo, yo venía a decirte que espero ansioso el concurso de pintura. Estoy seguro que tu pintura será genial.

- Gracias Min-ho. Será muy bonito si vas.

- Cuenta con ello entonces. Adiós Precioso.

- Adiós MinMin.

- Adieu MinMin. — me despido.

Debo agregar que el hablar francés en diversas situaciones que no lo ameritan, se debe a Tae.

Volteo divertido luego de ver la mirada de molestia de mi enemigo. Dirijo mi mirada a Tae y lo encuentro con su lindo ceño fruncido. En mi defensa, pensé que lo de "solo me interesa un pene" sería romántico en un futuro. Llevo mi dedo a que destruya esa expresión en su frente y termino con un manotazo.

- ¿Por qué siempre tienen que pelear? — pregunta y se escucha fastidiado.

- Es el quién empieza, mi sol.

- Y tú quién lo sigue, tonto. Choi, también es mi amigo Kook. Y tú eres más importante, pero te comportas algo infantil a veces. — y tiene razón. Soy algo infantil contra Min-ho. Su molestia llega a entristecerme un poco, y apoyo mi cabeza en mis manos. El parece notarlo y cambia su ceño fruncido por uno de preocupación. Hace el mismo gesto que yo y coloca sus manos en mis mejillas, moviéndolas, haciéndome reír. — Pero, debo admitir que el chiste de "cara de pito" fue uno de los mejores.

- ¿Lo sé verdad? — pregunto orgulloso.

- Si, pero me interesa saber ¿cuál es ese pene que te gusta?

- Uhm... — oh no.

Un gran jadeo se escucha de su parte y yo alzo mi vista de la mesa para verlo con desesperación en mi mirada de que algo malo de haya pasado de repente como un ataque de asma o algo por el estilo. Al cruzar miradas recuerdo que no es asmático y que en realidad solo es extremadamente dramático con ciertos temas.

- ¿En serio está dudando Jeon Jungkook, alias lapin, de contarle algo a su mejor amigo de todos los tiempos Kim Taehyung, alias puce?

- No-no es eso, es que solo era una broma, no es verdad que me guste un pene, pfff. Solo bu-buscaba una respuesta inteligente para MinMin; en realidad me encantan los penes no solo uno ja...

- ...No te preocupes, me lo dirás después. Quiero que me acompañes a un lugar. - dijo después de haberme visto a los ojos mientras decía todo lo anterior para lo que en realidad no tengo ningún comentario, analícenlo por su cuenta.

🔅

- ¿Aquí querías venir?

- ¿Esperabas que te llevara a un lugar diferente, pequeño dongsaeng?

A base de mentiras, Taehyung me trajo al salón de clases. Al parecer, el adulto más responsable de entre los dos, se olvidó de sus libros encima de su carpeta.

- En mi defensa, el profesor estuvo haciendo muchas preguntas; yo estuve ocupado resolviéndolas en la libreta.

- Si te creo. Pero fue en parte por lo distraído que eres.

- Distraído tu culo.

- Que horrible lenguaje Kim.

- A mi me parece adorable. — habla una tercera voz.

Ambos volteamos sorprendidos por la intervención y Slame Mark se cruza en medio de nuestros ojos. Su sonrisa presumida hace acto de presencia y mi Tae de esconde casi detrás mío. Olvidé mencionar el detalle de que a mi Tae, este miembro de la maldita trinidad, le es muy incómodo.

- ¿Qué tal, Jeon, Tae? — dice a modo de saludo.

- Hola, Mark. — saluda Tae cortés, escondiéndose más detrás mío con disimulo. Si hay algo que él, no puede soportar, son los situaciones incómodas. — Nosotros ya nos íbamos, solo vinimos para recoger  algunas de mis cosas y-

- Quiero hablar contigo antes, Tae.

- Uhm, perdón pero ya nos tenemos que-

- Si, pueden irse pero después de que yo hable contigo

Me molesto y seguramente se nota, pues la mirada del chico se topa con la mía y sonríe socarrón. Es muy... vulgar, diciendo cosas como estas sin siquiera una pizca de broma en la cara, ¡El habla en serio! ¡Verdaderamente se cree el mejor partido! Qué gracioso, todos sabemos que el mejor partido soy yo. Pero ya, en serio, la autoestima es buena, pero él ya cruzó una línea con mi sol al reclamarlo de tal manera. Mate a quién tenga que matar, este osado hombre ha entrado a un territorio peligroso y este caballero defenderá al príncipe pulga cueste lo que cueste.

The French styleWhere stories live. Discover now