Donde Misuk Mun, una chica de personalidad rebelde y un pasado que prefiere esconder se enamora de un chico inocente, justiciero y amable
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Donde Euntae Lee, alías Vasco conoce a una chica que aunque sea su polo opuesto, se encariña y termina enam...
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-¿Que?... ¿Terminar? ¿Linda es enserio?...-Pregunto el desconcertado chico castaño.
Misuk había ido a la casa de chico, en la cual a la hora que ellos estaban, no había nadie. Para poder terminar con el de forma tranquila y sin público.
-Si Matt, las cosas empezaron muy bien entre nosotros y yo te quiero mucho, pero no creo que debamos seguir juntos... Eres muy, como decirlo... Intenso para mí-Le explicó apenada la chica y con los ojos brillosos, estaba a nada de romper a llorar.
El pobre corazón de Matt estaba rompiéndose. Y había comenzado a llorar.
-Pero linda, por qué no arreglamos las cosas, dime qué quieres que cambie y lo hago, no quiero que terminemos amor, te quedó mucho-Le dijo mientras lloraba el chico abrazandola con fuerza.
Misuk se dejó abrazar y paso sus brazos hasta su espada también.
-No, no debes cambiar por mí Matt... Lo mejor es que terminemos y si tu quieres volver a ser amigos, se que sera incómodo al principio pero estoy segura que si ambos ponemos de nuestra parte-
Antes de que pudieran continuar hablando, Matt la levantó del suelo y la coloco en su cama. Pues estaban en la pieza de el. Con cuidado la hizo acostarse y el se acosto a su lado.
Misuk no puso ninguna resistencia a esto, el solía hacerlo seguido, claro que antes lo hacían mientras reían y ahora el chico no paraba de llorar.
-Misuk, por favor, no termines conmigo, puedo cambiar todo lo que te molesta... Pero por favor, no me dejes-Le pidió mirándola a los ojos.
Los brillantes ojos de Misuk vieron con lastima a su ahora ex novio. Coloco ambas manos en su rostro y lo acaricio con sus pulgares.
-Matt, sabes como soy, una vez que decido algo no cambio de opinión y tu sabes que no cambiarás, así no hagas esto más difícil- le dijo dándole una leve sonrisa.
Matt al oir eso comenzó a llorar de nuevo mientras la abrazaba con fuerza y colocaba su cabeza en el cuello de la chica.
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