Shall we Dance? *Edición*

Shelter

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        Acto LXI

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Denki POV

Me encontraba nervioso, no podía entender como todo mundo estaba como si nada revisando su equipo musical, como si no se fueran a presentar en unos minutos frente a un auditorio, con prensa internacional.

—no pienses en eso Denki, no lo hagas— me susurraba a mi mismo para intentar ganar el valor que poco a poco me estaba abandonando.

Me asomo entre las bambalinas para ver cómo el público estaba sentado escuchando esa maravillosa pieza musical compuesta en violonchelo.

Estoy frito. ¿Realmente podría ganar aquí?

Todo mundo es tan formal, y muchas de las piezas son música clásica, tanto así que me siento un poco avergonzado de la canción que estoy por presentar.

¿Realmente es suficiente?

¡No!

No debo pensar en eso, yo estoy aquí no para ganar, sino para transmitir algo. Mis ojos buscan entre el público hasta encontrar esa cabellera pelirroja, sentado junto a una rosada.

Lo miro unos momentos hasta que su mirada se encuentra con la mía.

No pude evitar sonreír.

"Lo harás bien, estoy orgulloso de ti"

Si tu estas ahí para mi, creo que puedo lograr lo que sea. Me siento fuerte y capaz de surcar el mismo espacio sideral.

—¡hey! no creo que te haga bien ver a los otros concursantes— una voz me interrumpe por unos momentos y me volteo a ver a aquel chico ojeroso y de pelo morado teñido.

—no pude evitarlo— conteste algo avergonzado y una pequeña risa de vergüenza salió de mis labios.

—hey, tranquilo, mirame— Shinso me toma de las mejillas para verlo a los ojos.

—lo harás muy bien— me dice con una sonrisa sincera y no puedo evitar devolverla.

—gracias— dijo tímidamente y Shinso solo niega con la cabeza.

—no es por animarte, conozco tu talento, y es momento en que puedas transmitir lo que sientes y dejes de esconderte como yo lo hago— me dice con una sonrisa y yo se la regreso.

Pese a que lo nuestro fue simplemente pasional y lleno de toxicidad, Shinso era un buen chico, un chico que vivió situaciones que lo encaminaron a no tomar las mejores decisiones.

Pero era un chico que no estaba hecho para mi.

—tú también lo harás genial— Shinso era mi competencia en el concurso, pero aún así me intentaba animar.

Si tan solo su sonrisa no fuera falsa, y si tan solo disfrutara de la música, estoy seguro que sería invencible.

Pero Shinso está perdido, incluso más de lo que yo lo estuve jamás, pero no puedo ser la brújula rota de un mapa que no lleva a ningún lado. Me quedó claro el día de la fiesta de Momona.

—¿sigues enojado por ese día?— me pregunta y yo niego con la cabeza.

—no, tomaste tu decisión, no puedo salvarte de ti mismo y menos si no puedo salvarme a mí. Aún estás a tiempo de mejorar, salir de esto Shinso— lo mire con un rostro suplicante, pero él solo desvía su mirada y ve hacía al piso.