12;♡

1.1K 173 91
                                    

Jisung gimió y se agarró la cabeza antes de que explotara. Había sufrido palizas que no dolían tanto. Se dio la vuelta, apretando la cara contra la almohada, esperando que la luz horriblemente brillante del techo se apagara.

El balanceo sólo hizo que su estómago se revelara.

Jisung se tapó rápidamente la boca con la mano mientras se incorporaba y saltaba de la cama, corriendo hacia el baño. Lo hizo justo a tiempo para caer de rodillas antes de que cualquier brebaje de la muerte que se hubiera tragado la noche anterior saliera. Jisung iba a morir. Él sólo lo sabía.

- ¿Cómo está la cabeza?

- Ouch.- Jisung se tapó los oídos. La profunda y divertida risita de Minho retumbó a través del cuarto de baño como un tren de carga en un túnel.- No gritar.

- Aquí, amor, tómate esto.- Minho se puso en cuclillas delante de Jisung y sostuvo un vaso hacia él.- Va a hacer que te sientas mejor.

Jisung estaba bastante seguro que sólo la muerte lo haría sentir mejor, pero si Minho lo decía... el estómago de Jisung comenzó a rodar de nuevo cuando un horrible hedor flotó hasta su nariz. Él frunció el ceño mientras miraba hacia abajo el vaso de lodo marrón, grumoso.

- ¿Alimentas a Jisung con p-?

- No.- Minho volvió a reír.- Es una cura para la resaca.

Podría haber engañado a Jisung.

- ¿Resaca?- ¿Así era como ellos llamaban a esta muerte en vida?

- Una resaca es lo que ocurre con hermosos Jisungs que beben demasiado alcohol.

El ceño de Jisung se profundizó cuando miró a Minho.- ¿Hay más de un Jisung?

- ¡No!- Los labios de Minho se adelgazaron.- ¿Qué te hace pensar eso?

- Dijiste Jisungs, no Jisung.- Jisung levantó dos dedos.- Eso más de uno.

- Sólo bebe la cura, Jisung.

Jisung olfateó el contenido del vaso y luego gimió, sosteniendo el lodo fuera y lejos de su cara.- Huele mal.

- Lo sé, amor pero tienes que tomarlo.

- No quiero.

Minho se rió de nuevo y Jisung lo odió por ello.- Si bebes todo esto de un trago, lavaré tu cabello para ti.

Jisung parpadeó hacia Minho. ¿En serio? ¿El gran malo líder del aquelarre lavaría su cabello si bebía la cura? Jisung se pellizcó la nariz con los dedos y luego inclinó el vaso a sus labios y se tragó todo el lío repugnante.

Por un momento, tuvo miedo de que todo regresara cuando su estómago rodó y se apretó, luego rodó un poco más. Jisung dejó el vaso y extendió su mano sobre su boca, rezando para no vomitar delante de Minho.

Esa no era la forma en que quería que su vampiro lo viera.

Cuando su estómago finalmente comenzó a asentarse, Jisung bajó la mano y miró hacia Minho.- Sangre sabe horrible ahora.

- No, amor, tu sangre tendrá un sabor tan dulce como siempre lo hace en poco tiempo. Espera unos minutos para que la cura actúe y entonces veremos. Comenzarás a sentirte mejor enseguida.

Jisung gimió y apretó su cabeza contra el muslo de Minho.- Nunca sentir bien de nuevo.

Los dedos de Minho se enroscaron por el cabello de Jisung, en realidad haciéndolo sentir un poco mejor.- Felix está tan enfermo como tú.

- Lix malo.- Jisung gruñó.- Beber divertido mi trasero.- Tirando del regazo de Minho, Jisung señaló a la ducha.- Necesitamos limpiar.

Minho asintió y se puso de pie, dejando a Jisung desvestirse. Él abrió el agua y dio un paso bajo la ducha caliente, suspirando por lo bien que se sentía. Jisung escuchó un ruido detrás de él y se volvió.

Era Minho. Jisung se quedó allí, hipnotizado por la belleza de Minho. No había ni un gramo de imperfección en cualquier parte del cuerpo del hombre.

Minho se estiró como si se enorgulleciera de su cuerpo bien afinado, mostrando sin vergüenza su físico masculino para que Jisung lo tomara.

- ¿Necesitas ayuda?- Minho preguntó mientras su enorme mano vagaba por su estómago y sus ojos rojos bajaron hasta que estuvo mirando directamente a la erección en toda regla de Jisung.

preciousNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ