Out Of The Blue

_•_Capitulo 3_•_

Capítulo 3

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No, no es necesario que lo entienda
Por que nunca le ha servido la razón
Al corazón, el corazón no piensa...
No mi vida, ¿para qué te esfuerzas?
No me tienes que explicar
Siempre amare tu libertad, por mucho que eso duela

Y si, entiendo que quieres hablar
Que a veces necesitas saber de mi
Pero no sé si quiera saber de ti
Y vivir así, seguir así, pensando en ti

[...]

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Jacob caminó de regreso hacia la residencia de los Cullen, siguiendo los pasos de Edward. Ambos caminaban lentamente, como si les pesaran las piernas.

Las palabras de Edward daban vueltas en su mente y lo atormentaban a cada paso. Todas ellas eran como cuchillas afiladas y puntiagudas, y se clavaban más profundo en su maltrecho corazón. Haciendo más grande la herida y permitiendo que sangre con más fuerza.

Fuera de la casa, Jacob podía escuchar la conversación susurrada que mantenían el resto de los Cullen, y se preguntó si ellos habían escuchado la conversación que tuvo con Edward. Se preparó para pelear una batalla perdida y entró a la casa.

Podía sentir cómo su cuerpo se ponía más rígido con cada paso que daba, con cada respiración que tomaba.

"No lo haré. Todo esto es retorcido y erróneo." pensó Jacob mientras subía las escaleras. "Olvida todo lo que él te ha dicho" se dijo a sí mismo. "Aún así hablaré con ella, me esforzaré por hacerle entender, trataré de que me escuché." Pensó Jacob, intentando darse ánimos para completar su misión, aún estando totalmente consciente de que ella no lo escucharía, como siempre.

Cuando por fin llegaron al segundo piso el resto de los Cullen voltearon a verlos con miradas suspicaces y confusas, nadie parecía disgustado ni indignado. Ninguno de ellos parecía consciente del favor que Edward le pidió a Jacob.

Jacob pudo sentir la intensa mirada del vampiro empático le estaba dando. "Probablemente a captado el cambio y la intensidad de mi sufrimiento." Pensó sin darle mucha importancia al asunto, en su lugar se enfocó en la pareja que intercambiaba miradas.

— Dejemos que Jacob y Bella hablen en privado—. ordenó Edward, su voz dura y firme.

—¡Sobre mi cadáver!— gruñó Rosalie, sin moverse de su lugar al lado de Bella, acariciando una mejilla pálida y grisácea de Bella con sus frías manos.

Edward ignoró a su hermana. —Bella— dijo con un tono vacío —Jacob quiere hablar contigo ¿te da miedo estar a solas con él?

Bella observó confundida a Jacob, luego miró a Rosalie—Rose, está bien, Jake no nos lastimara. Ve con Edward.

—Podría ser un truco— dijo la rubia, sin querer ceder en lo más mínimo.

—No veo como— dijo Bella.

—Carlisle y yo estaremos todo el tiempo a tu lado, Rosalie—. dijo Edward, la inflexión de su voz era dura, mostrando a través de ella su furia.

—Nosotros somos los únicos a quienes teme Bella.

—No— objeto Bella con un jadeo, sus ojos estaban brillantes, húmedos. —No, Edward, yo no...

Edward sacudió la cabeza con una pequeña sonrisa.

—No quise decirlo de esa manera, Bella. Estoy bien, no te preocupes por mí.

Para Jacob fue doloroso ver esa sonrisa. En el rincón más alejado de dónde se ve a Jacob, está Jasper, observando atentamente al moreno, monitoreando cada cambio de emoción que sufre y "viendo" que la agonía de Jacob se incrementa cada que Edward deja caer su máscara de control.